Venado Tuerto. - Un grupo de vecinos de esta ciudad comenzará a partir de mañana una campaña para juntar fondos para someter a un implante de prótesis a una nenita de diez años que perdió sus dos brazos en un accidente agropecuario. El desgraciado hecho ocurrió en un campo de la localidad de Canals (Córdoba), el 19 de julio pasado, mientras Anahí Reinoso jugaba con un chimango, utilizado para transbordar cereal. La niña necesita dos prótesis para suplantar los brazos perdidos en el infausto accidente.
Desde ese día las cosas ya no fueron como antes para Anahí. A fuerza del destino tuvo que aprender a escribir con la boca, al igual que otros menesteres como el de prender y apagar la llave de gas de la cocina. Una terapista ocupacional, Gretel Folmer, colabora estrechamente en la recuperación de la niña y lo hace en forma solidaria.
No obstante la chiquita tiene un ímpetu increíble y pese a la desgracia padecida nunca deja de sonreír y mimar a sus padres, "pese a que por momentos la hermanita menor se pone un poco celosa" confió el papá Luis.
Cambio de hábito
Anahí cursa sus estudios en la Escuela Nº 1.201 (Castelli y Maxwell) y es una de las preferidas por sus compañeritos. Prueba de ello es que a partir de su vuelta a la escuela los alumnos y el personal docente decidieron que en los actos se aplauda con los pies.
La directora de la humilde escuela, Alicia Blasco, no sale de su asombro ante la actitud de los compañeritos de Anahí. "Ver que todos los chicos aplauden cuando se canta el Himno o por otra razón es francamente impresionante", señaló, y agregó: "Realmente está situación nos hizo madurar a todos y nos dio una lección de vida".
"El empuje que tiene Anahí es increíble ya que otra persona en su lugar no sé cómo hubiese reaccionado ante tanta desgracia", confió su papá al tiempo que se mostró esperanzado en que "va a salir adelante porque tiene todo el empuje de una chica de diez años y unas ganas de vivir que contagia".
Pero la solidaridad puesta de manifiesto por los chicos no se demuestra sólo en el hecho de los aplausos. Apenas se enteraron del accidente los alumnos de la escuela organizaron una colecta en el barrio con pequeñas alcancías, en algunos casos eran latitas de conserva. Pensaban, con la inocencia que tienen los niños, que ese sacrificio podría devolverle los brazos a su compañerita.
La familia Reinoso es de condición humilde y muchas de las cosas que están logrando para la hija mayor es gracias al esfuerzo de la comunidad y al de los allegados más cercanos. La casa donde viven (Castelli 2770) fue prestada por una persona vinculada al entorno, ya que en el lugar donde ellos estaban no se podía vivir más. "Nos tuvimos que mudar porque había un foco infeccioso muy grande en nuestro barrio y eso podía empeorar las cosas para Anahí", señaló Maricel, la mamá.
Campaña rotaria
Un grupo de mujeres del Rotary Club ya comenzaron una campaña para recolectar fondos a los fines de atender la demanda de Anahí. Desde mañana hasta el 6 de octubre se realizará una colecta en 50 lugares de la ciudad para comprar las dos prótesis que le hacen falta a Anahí y que cuestan alrededor de 24 mil pesos. En la plaza San Martín, el 6 de octubre se efectuarán diversos espectáculos artísticos a modo de culminación de la semana solidaria.
Incluso también a partir de mañana se habilitará una cuenta a nombre de Anahí Reinoso y del Rotary Club en el Banco Nación a los fines de recaudar fondos para el delicado tratamiento e implante. El teléfono disponible para todos aquellos interesados en colaborar es el 03462-420512, de la Escuela Nº 1201, o el (03462) 427655.