Cañada del Ucle. - Con obras, una exposición, actos y un almuerzo que convoca a toda la población, esta pequeña localidad del sur santafesino se apresta a celebrar su centenario. La fecha central es el viernes 27 pero las actividades comenzaron ayer con una muestra del sector productivo, comercial, artesanal y de servicios. La fecha encuentra a la comunidad con un mercado interno reactivado por su relación directa con el buen momento por el que atraviesa el campo, su principal fuente de recursos.
Seis años atrás, esta comunidad trascendió a nivel nacional cuando nacieron sus habitantes más famosos: los sextillizos Asencio. Si bien tuvo épocas con mayor cantidad de habitantes, hoy sus 1.200 pobladores lograron una dinámica de producción que los convierte en una de las pocos lugares de la zona con escasa desocupación. Ariel Caram, el presidente de la comuna, anunció la inauguración de un arco de entrada, nueve viviendas y el compactado con piedra caliza de las calles de tierra.
"No nos quedó más lugar", explicó con orgullo Omar Saraceni, portavoz de la comisión que organiza los festejos, respecto de la Expo Centenario que se realiza hasta mañana. El día del centenario la fiesta incluirá desfiles, banda de música, autos antiguos, centros tradicionales y escuelas. El broche de oro será el domingo 29, con el almuerzo del reencuentro, durante el cual se presentará la "Marcha del Centenario", compuesta por el joven Iván Ferreyra.
Días atrás, y con la colaboración de la empresa Nuevo Central Argentino, un tren de pasajeros se encargó de recorrer la misma línea que dio origen al pueblo. Los vecinos participaron del viaje a localidades cercanas, tomaron fotos e hicieron circular las anécdotas que guarda la memoria colectiva sobre los años fundacionales del lugar. Ahora el cumpleaños número cien de la comunidad volvió a unir a la gente.
"Los productores del lugar donaron las vaquillonas y los cerdos para el almuerzo, así logramos una tarjeta accesible para que no quede nadie sin asistir", explicó Saraceni, y acotó que como plato de entrada se servirán chorizos elaborados el día anterior a la fiesta, reactualizando una de las prácticas corrientes en el campo. "Hay equipos que están trabajando desde hace meses", agregó como muestra de los lazos de pertenencia que existen en las pequeñas comunidades.
Primer núcleo de casas
Cañada del Ucle, cuyo distrito abarca 25 mil hectáreas, debe su nombre a la decisión de los ingleses que construyeron el ferrocarril que generó el primer núcleo de casas y que así bautizaron la estación. Por otro lado, y en reconocimiento a quien donara las tierras para su trazado, el pueblo llevó el nombre de Carlos Doce. Una consulta popular terminó dirimiendo a favor de la nominación topográfica cañada, por el bajo que había en el lugar, y ucle, por una especie de cactus que también abundaba.
"Lento pero seguro", calificó Caram al desarrollo del pueblo, ubicado a unos 12 kilómetros de Firmat. Claro que igual deben soportar el éxodo de los jóvenes estudiantes. En contrapartida, instituciones intermedias como las cooperativas agrícolas y de obras y servicios públicos tienen un accionar que consolida el mercado interno junto con pequeñas fuentes de trabajo dedicadas a los implementos agrícolas.
"No todos los pueblos -sostuvo Caram- tienen la suerte de tener poca gente con sus necesidades básicas insatisfechas; esto ocurre porque al no llegar gente de afuera, podemos autoabastecernos en cuanto al trabajo".