Piden reactivar una fábrica en Firmat

Gestiones para que la planta de Roque Vassalli reabra sus puertas en la ciudad

Silvia Carafa / La Capital

Firmat. - Las autoridades municipales plantearon ante el juzgado que entiende en la quiebra del grupo Koner-Salgado la necesidad de que la venta de la fábrica Roque Vassalli no implique el desmantelamiento de las instalaciones y la pérdida de cientos de puestos de trabajo. La inminente licitación de la planta, inactiva tras el arrendamiento dispuesto en el marco de la causa judicial, alertó a la comunidad. Además, cosechó adhesiones a favor de su permanencia en la ciudad que la vio crecer.
El intendente Carlos Torres expuso ante la jueza de la quiebra en Capital Federal, Julia Villanueva, la necesidad de que la fábrica reabra en Firmat teniendo en cuenta a los ex empleados. "La venta de la planta y su reapertura en esta ciudad tienen que ir de la mano", dijo Torres.
Según el intendente, hay interesados en la compra de las instalaciones de Roque Vassalli, cuyo destino manejó el grupo Koner-Salgado entre 1987 y 1998, cuando se decretó la quiebra. A la venta estarán los terrenos, los galpones, las maquinarias y el intangible de mayor valor: la marca Vassalli. "No queremos que se lleven la fábrica aprovechando el nombre y nos dejen los galpones vacíos y la gente en la calle", argumentó.
Una vez dictada la quiebra de Koner-Salgado, la fábrica de cosechadoras pasó por varias experiencias de reactivación, pero ninguna prosperó. Ahora, y desde hace dos años, la inactividad de las instalaciones sobre la ruta 33 contrastan con el ritmo que tiempo atrás le dio a Firmat su hoy añorado perfil industrial. "Ese predio es patrimonio de la ciudad y la comunidad no permitirá que se traslade", dijo Torrés.
En tanto, el Concejo solicitó a la Legislatura una ley que permita la expropiación con cargo de las instalaciones de la empresa Roque Vassalli SA y de su marca comercial, con el objeto de reactivar la fuente laboral a través de la Cooperativa de Trabajo Metalúrgica de Firmat, integrada por ex empleados de esa firma. El cuerpo sostiene que la puesta en marcha no sólo implicaría crear empleo sino además un importante movimiento económico para esta zona.
"Se trata de lograr que la fábrica quede en Firmat", explicó la presidenta del Concejo, Lía Pipino. La resolución aclara que con la expropiación también se pretende evitar que máquinas e instalaciones sean objeto de ventas separadas o adjudicadas a intereses foráneos.