| | Lavagna envía un presupuesto que descuenta el aval del Fondo
| El gobierno presentará el viernes próximo al Parlamento el proyecto de presupuesto para el año 2003, que contendrá una previsión de crecimiento del 3%, incluirá los recursos para el pago del 13% a estatales y jubilados y, como dato optimista, estará confeccionado en base al supuesto de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Esto significa que el proyecto de presupuesto para el año próximo no contemplará fondos para el pago de 17 mil millones de dólares que se acumulan por el pago de vencimientos ante organismos internacionales. Si bien la demora en cerrar las negociaciones alteró los planes originales el gobierno está decidido a cumplir con los plazos constitucionales, más allá que a posteriori se introduzcan cambios. Por otro lado, y a pesar de las críticas que llovieron la semana pasada desde el Fondo Monetario Internacional y Estados Unidos, el gobierno se muestra optimista respecto de llegar a un acuerdo con los organismos internacionales. El vicejefe de gabinete, Eduardo Amadeo, dijo que el acuerdo está más cerca de lo que se cree y expresó su satisfacción por la postura que están expresando sobre el tema los precandidatos justicialistas. El secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, y el presidente del Banco Central, Aldo Pignanelli, se reunirán el jueves próximo con el subsecretario del Tesoro de Estados Unidos, John Taylor, y con la vicedirectora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), para destrabar las negociaciones. Mientras tanto, en Argentina, el equipo económico no perdió tiempo en su intento de mantener la iniciativa. Dejó trascender que el viernes presentará el proyecto de presupuesto 2003, con números que descuentan el acuerdo con el Fondo. La iniciativa incluye las partidas necesarias para reintegrar a los empleados estatales el 13% por ciento descontando de sus salarios desde julio del 2001. El retroactivo será pagado en bonos. También prevé la cancelación a las provincias de distintos fondos especiales que no fueron pagados durante el ejercicio en curso. En la nómina de gastos también se incluyó el rescate de las bonos cuya aplicación al pago de impuestos el gobierno suspendió por decreto la semana pasada. Algunos trascendidos señalan que se prevé un crecimiento de la economía que orillaría el 3%, con ingresos fiscales por encima de los 52.000 millones de pesos. Habría un superávit primario de 0,8%, mientras que la pauta de inflación sería una de las últimas en fijarse pues aún es objeto de discusión.
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