Año CXXXV
 Nº 49.597
Rosario,
martes  10 de
septiembre de 2002
Min 8º
Máx 18º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Inferiores de AFA
La 7ª de Newell's ganó jugando a media máquina

Mariano Bereznicki / Ovación

Cuando atacó lo hizo con la contundencia de los equipos que tienen serias intenciones de quedarse con los tres puntos. Y la vez cuando se dedicó a defender, lo hizo prácticamente sin fisuras. A tal punto que con un período le bastó para erigirse en el único protagonista de la tarde. Es que la 7ª de Newell's, después de un comienzo dudoso, terminó quedándose con una victoria ante Lanús por 2 a 0, que le sirve, además de trepar un poco más en la tabla de posiciones, para llegar al clásico del sábado ante los canallas con una inyección extra de ánimo.
Muchos eran los interrogantes que rodeaban a esta divisón antes de empezar el partido. Es que como tres de sus figuras estaban con el seleccionado argentino Sub 17 en Venezuela, disputando un torneo internacional, muchos ponían en tela de juicio cómo podían responder sus reemplazantes.
Y los pibes cumplieron de tal manera que la mayoría del público casi que ni se acordó de los seleccionados.
Lanús comenzó siendo el dueño de pelota y pobró los reflejos de Romero en dos ocasiones muy peligrosas y con destino de red. Pero el uno leproso tapó los remates con mucha seguridad, lo que ponía de manifiesto que no le pesaba ser el reemplazante de Guzmán.
Después, los defensores Febre y Benítez también hicieron olvidar a los seleccionados Garay y Fórmica. Además de eso, los demás jugadores leprosos comenzaron a pisar el acelerador, a tal punto que fueron poniendo a los granates contra su terreno.
Primero un disparo medio mordido pero bien esquinado de Héctor Steinert fue el que inauguró el marcador. A esa altura, no era sorpresa que Newell's estuviera arriba en el marcador porque venía jugando bien.
Después de varios minutos de buen fútbol, con rotación, variantes y cambios de ritmo incluido, los locales aumentaron. Y otra vez a través de Steinert, quien esta vez clavó un remate cruzado. Fue un golazo y hora de ir a los vestuarios a descansar.
La segunda etapa se jugó con menos intensidad pero siempre tuvo como protagonistas a los locales, quienes tuvieron varias chances más para aumentar pero cuando llegaban al área terminaban rifando la pelota.
Lanús se resignó y no tuvo más remedio que aguantar hasta el final. Es que Newell's había hecho todo y a media máquina. Ahora se viene el clásico y espera tranquilo a Central que, vale acotar, viene en ascenso.


Diario La Capital todos los derechos reservados