Dos de los detenidos por el secuestro y crimen del joven Diego Peralta en El Jagüel declararon ante la Justicia y acusaron a tres de los apresados como entregadores y asesinos del chico. Los investigadores dijeron que "si bien todas las indagatorias están previstas para hoy, dos de los acusados de ser partícipes secundarios, se quebraron y hablaron a última hora del sábado ante el juez Carlos Ferreiro Pella".
En esas declaraciones, los acusados, cuyas identidades no fueron reveladas, confirmaron que uno de los presos, conocido como "El Chino" fue el entregador del secuestro, y que tanto la "Gorda Rosa" como su novio, alias "Pipi", fueron los matadores.
Según fuentes del caso, de acuerdo con las declaraciones, a Peralta lo asesinaron porque reconoció a uno de los secuestradores. "Todo indica que al chico se le cayó una venda que tenía puesta y que reconoció a uno de sus captores, y por eso lo mataron", contaron.
Siempre, según esta línea, la estrategia de cada uno de los acusados sería la de señalar a los otros presos por la autoría del homicidio. De acuerdo con las fuentes, los dos detenidos que se quebraron también dijeron que a Peralta lo asesinaron cuando ya se había cobrado el rescate.
El jefe de la Brigada Antisecuestros, Domingo Casafus, dijo hoy que con las detenciones realizadas el sábado en distintos allanamientos en el Gran Buenos Aires, el secuestro y crimen de Diego Peralta "está totalmente esclarecido".
Empezó un buen negocio
Una de las principales empresas de seguridad del mundo, de origen estadounidense, impulsará en la Argentina un dispositivo de control de empresarios para "monitorear" sus movimientos en caso de secuestros.
La firma Kroll considera que Argentina está al mismo nivel de Venezuela y Ecuador en materia de seguridad, y, por lo tanto, decidió dictar entre los ejecutivos cursos antisecuestros. La "ayuda" incluye mitigar los crecientes riesgos como crímenes de cuello blanco, fraude, disputas de negocios, lavado de dinero, amenazas, terrorismo cibernético y violencia a través de auditorías internas.
El presidente de esta multinacional es Frank Holder, un ex miembro de inteligencia de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, cuya empresa lleva casi una década en la Argentina. Inclusive, se llegó a vincular a esta empresa con ex agentes de la CIA, pero sus directivos lo negaron. "Hoy, existe una diferencia abismal entre Buenos Aires y Santiago de Chile y no es tanto en la cantidad de delitos, que sí aumento muchísimo, sino lo que mas asusta es la velocidad con que aumentó, porque en seis meses se disparó y se quintuplicaron los índices de secuestro que es lo que tiene aterrado a todo el mundo", indicó Mariana Idrogo, directora de Kroll. Sin embargo, la ejecutiva no olvida que "Argentina es un lugar que desde el punto de vista del terrorismo tiene un nivel de riesgo muy alto a diferencia de otros países". Aunque, aclara, "si hoy le preguntamos a la gente que trabaja con nosotros si está preocupada por el terrorismo, diría que no".
Idrogo adelantó que "estamos armando para que en breve, en 45 días, esté funcionando una central de monitoreo para localización de ejecutivos".
"Es un sistema donde una empresa contrata el servicio para un determinado número de ejecutivos y cada uno de ellos va a portar un dispositivo que transmite en forma permanente una señal a una central de monitoreo nuestra", explicó. (DyN)
La Ciudad
