El gobierno volvió ayer a mostrar fisuras en torno a la posibilidad de suspender las elecciones internas mediante un consenso político, con el objetivo de superar la áspera puja dentro del justicialismo. En ese sentido, se avanza en la idea de convocar al congreso nacional del PJ, tema que marcará el pulso del encuentro que el miércoles próximo mantendrá el presidente Eduardo Duhalde con los mandatarios peronistas. Aunque, tan sólo 24 horas antes de esa cumbre, el jefe del Estado desembarcará en la ciudad Santa Fe, en una visita que seguirá potenciando la polémica.
Duhalde llegará a la capital provincial con la excusa de darle el puntapié inicial a un importante plan de obras públicas para Santa Fe, Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa y la Capital Federal.
Estarán presentes el gobernador santafesino, Carlos Reutemann, y sus pares Felipe Solá (Buenos Aires), Herman Oliverio (Córdoba-reemplaza a José Manuel de la Sota, de licencia), Sergio Montiel (Entre Ríos) y Rubén Marín (La Pampa), además del jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra.
En tanto, la Casa Rosada prepara para el día siguiente un encuentro con los gobernadores del PJ, donde (si bien oficialmente se aclaró que es para tratar la coparticipación) no se descarta que la cuestión política esté presente en las conversaciones.
Duros y flexibles
Mientras el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, y el ministro del Interior, Jorge Matzkin, insistieron en que deben realizarse las internas, el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, fue más flexible.
Fernández dijo que el cronograma electoral "ya está fijado" y que Duhalde sostiene la realización de las internas, pero reconoció que está abierto a otra posición que pueda surgir del congreso nacional del PJ, que preside Reutemann.
Asimismo, subrayó: "Si por fuera de esta posición (de Duhalde) hay quienes pueden abogar por una presentación distinta, con características de simplificación, y evitar una interna, el presidente le prestará atención y, a lo mejor, trabajará sobre el tema".
Frente a los recientes movimientos del Lole, Matzkin advirtió, a su turno, que "las reglas de juego" que definirán el proceso electoral ya "están" resueltas y, por lo tanto, "no es tan fácil ponerlas a la medida de cada uno".
Cuando se le recordó que Fernández había dejado abierta la puerta a la no realización de internas, Matzkin sólo indicó: "Es una posibilidad que otro funcionario de la Nación diga lo contrario".
En sintonía con Fernández, el secretario privado de Duhalde y hombre de su mayor confianza, José Pampuro, había admitido el miércoles que "el PJ está buscando un consenso y, de existir, podría realizarse un congreso partidario en los próximos días para que, por lo menos, se defina la manera en que el partido se presentaría" a las elecciones.
El propio Duhalde aseveró que, si existe una "solución mejor" consensuada entre las fuerzas políticas respecto a la conveniencia o no de realizar los comicios internos, deberá ser aprobada en el Parlamento.
No obstante, los referentes del PJ en el Senado aseguraron que la cuestión "quedó cerrada" en el Congreso luego de que Duhalde firmara el decreto de rectificación, evitando una fractura en el bloque oficialista. Y agregaron: "Si hay gobernadores pidiendo que no se hagan las internas, es una cuestión de ellos que desconocemos".
Al mismo tiempo, el precandidato y gobernador salteño, Juan Carlos Romero, autor de la propuesta de convocar al congreso del PJ para que habilite a los postulantes a presentarse individualmente en las elecciones generales con los símbolos peronistas, y así sortear las internas, advirtió: "Sería estéril hacerlo si no hay consenso previo de los cinco aspirantes".
Desde Santa Fe, fuentes partidarias vieron con buenos ojos la iniciativa fogoneada por el diputado del PJ Gerardo Conte Grand, que, para ver la luz, deberá pasar por el Parlamento. "Es como una ley de lemas castrada, que ha alcanzado cierto consenso", dijeron anoche a La Capital. Aunque hicieron hincapié en un punto: "Si (el precandidato) Adolfo Rodríguez Saá advierte que puede ser el camino para que vuelva Reutemann, la va a torpedear, porque sabe que el Lole es el único que lo puede parar".
Además, al analizar la próxima reunión entre Duhalde y los gobernadores y la posible convocatoria al congreso del PJ, coincidieron en que, "evidentemente, todo esto muestra que no hay nada cerrado en lo que hace al proceso electoral".
A su vez, otros voceros reutemistas siguieron alimentando sus ilusiones, basándose en "recientes encuestas" que reflejarían una caída en la intención de voto a Carlos Menem.
En lo que hace a la definición de la interna, puntualizaron que "lo ideal sería acordar una metodología legal, legítima y, al mismo tiempo, lo menos desgastante posible, porque hoy no es un tema prioritario para la sociedad". Por último, destacaron: "No se puede ir a un congreso nacional partidario si no existe el debido consenso previo".
Paralelamente, Rodríguez Saá aprovechó para recalentar el debate interno durante el acto de lanzamiento de su precandidatura, que se realizó en el Luna Park (ver página 4), al enfatizar que los otros postulantes "no saben para qué quieren ser presidente".