El flamante ministro de Hacienda y Finanzas José María Candioti, se tomará un tiempo, antes de definir si se incrementarán los impuestos provinciales, para analizar cómo evolucionan las variables de la economía nacional y las propias. "Por el año 2002 no tenemos previsto modificar la política de ingresos", señaló ayer en su primera conferencia de prensa poco después de asumir en su cargo. Candioti descartó la posibilidad de emitir bonos durante el año próximo y confirmó a la totalidad de los integrantes del equipo que secundaba a su renunciante antecesor, Juan Carlos Mercier.
El gobernador Carlos Reutemann anticipó que la provincia evaluaba la posibilidad de incrementar impuestos a partir de 2003, tal como lo anticipó La Capital en la edición del domingo pasado. Un aumento de las alícuotas requiere de una aprobación parlamentaria y el Ejecutivo tiene plazo hasta el 30 de noviembre próximo para presentar la nueva ley de leyes. Reutemann puso como ejemplo de contribuciones que quedaron atrasadas al inmobiliario rural, teniendo en cuenta que ese sector pasó a recibir ingresos en dólares tras la devaluación, por lo cual tiene mayor capacidad contributiva, y también la patente automotor, y no tardó en desatar críticas de una de las entidades representativas del sector agropecuario (ver aparte).
Consultado sobre las declaraciones del Lole, Candioti precisó que "la revisión no tiene fecha, por lo tanto implica analizar la cuantía y la forma de la política tributaria, pero para el año 2002 no tenemos previsto modificar" el esquema tributario, recalcó.
"El presupuesto 2003 -añadió- tiene algunos disparadores que parten de la Nación, de modo que hoy sería apresurado hablar de políticas para el año próximo cuando tenemos que transitar el presupuesto de 2002 en términos de lo que va aconteciendo por el momento".
El flamante titular de Hacienda confesó que otra de sus "aspiraciones" radica en definir el presupuesto del año próximo a más tardar en septiembre, aunque admitió que para ello se debe "esperar y saber cómo se desenvuelve la relación entre la Nación y los organismos multilaterales de crédito, porque esa es una suerte de cascada que repercutirá en las provincias".
El titular de la cartera económica explicó que "actualmente los flujos de caja no tienen la automaticidad de otros momentos, cuando la recaudación era una cuestión inelástica, es decir que siempre iba para arriba. Hoy la recaudación sube y baja; hemos pasado un buen mes de julio con buena situación monetaria y fiscal a nivel país, con una razonable recaudación y un movimiento cambiario tranquilo. En este escenario el factor caja anduvo bien y es deseable que se mantenga, pero si a futuro debemos prepararnos para que determinadas contingencias retarden la recaudación, también tengamos la posibilidad de hacer un uso óptimo de los recursos de caja".
Candioti desechó también en lo inmediato la posibilidad de que Santa Fe recurra a la emisión de bonos para financiar su presupuesto: "Hoy en día la situación no avizora ese tipo de necesidad", resumió.
El funcionario anticipó que hará hincapié en el cumplimiento efectivo de "los compromisos asumidos con la Nación" en el pacto fiscal recientemente avalado por la Legislatura santafesina, por el cual se "limita la emisión de deuda y se prohíbe la emisión de bonos o cuasi moneda" por parte de la provincia. "Nuestra aspiración es no emitir deudas ni aumentar el pasivo de la provincia", refirió Candioti.
Definió dicho acuerdo fiscal como "un acuerdo de ida y vuelta. La Nación lo necesita para cumplir con las exigencias de organismos internacionales y la provincia para recibir los compromisos asumidos por el gobierno nacional", comparó.
Mirar antes de barrer
Al confirmar en sus cargos al elenco de colaboradores del ex ministro Mercier, entre ellos los secretarios de Finanzas, Miguel Asensio; y de Hacienda, Juan Carlos Raviolo, el flamante funcionario aseveró: "Se mantendrá la misma estructura porque tanto el gobernador como yo consideramos que el ministerio cuenta con recursos humanos que dieron una sobrada muestra de capacidad. Todos ellos gozan de mi respeto personal y profesional", remarcó Candioti, quien añadió que "no soy de llegar a un lugar y hacer un barrido. Soy de mirar, observar y recién después calificar. Esa calificación me permite decir que es un equipo idóneo para continuar", subrayó.
En cambio el ministro dijo que se "tomará unos días" antes de adoptar una definición sobre "el plan de acción futura" en el área de Obras Públicas que en el actual organigrama depende de la cartera de Hacienda y Finanzas.
Al referirse a los créditos concedidos a Santa Fe por parte del Banco Mundial y cuyos desembolsos aún están pendientes desde que la Argentina cayó en default, el ministro de Hacienda consideró "importante esperar el camino que el país siga con respecto a sus relaciones con los organismos multilaterales de crédito. Nuestro éxito tiene mucho que ver con el éxito que en este sentido pueda conseguir el gobierno nacional", insistió.
Candioti no soslayó la espinosa cuestión del gasto social que generó la póstuma pulseada entre su antecesor y el ex ministro de Salud que terminó eyectando tanto a Juan Carlos Mercier como a Carlos Parola de sus respectivos sillones. En ese sentido, si bien recordó que el presupuesto vigente ya tiene asignadas las partidas para las distintas áreas de gobierno, se comprometió a realizar "esfuerzos" para reforzar gastos sociales. "No vamos a mezquinar esfuerzos, vamos a profundizar todos los mecanismos que hagan falta para responder a las demandas sociales", finalizó.
La Ciudad
