Unas 20 personas se acercan por mes hasta la Dirección para la Inclusión de Personas con Discapacidad de la Municipalidad para solicitar un bastón, un par de muletas o una prótesis. En las oficinas del organismo existe, desde mediados del año pasado, una lista de espera de 32 personas. Por esto, se organizó una campaña solidaria para recolectar sillas de ruedas, muletas, bastones y todo tipo de elementos ortopédicos en desuso que luego serán reciclados en los talleres de esa dependencia.
A la Dirección de Inclusión de Personas con Discapacidad se acercan principalmente los pacientes de la salud pública municipal o personas de bajos recursos que no cuentan con cobertura social. Y, al compás de la pérdida de empleo y la precarización económica, la demanda se disparó.
"En los últimos meses, los pedidos se llegaron a triplicar y, además empezamos a recibir a mucha gente del Pami después que la obra social cortara el servicio de prótesis", aseguró la titular de la dirección, Silvia Tróccoli.
Para peor, el precio de los elementos ortopédicos creció exponencialmente desde la devaluación. En la actualidad una silla de ruedas cuesta entre 300 y 600 pesos, un par de muletas sale 80 pesos si está construido en madera y 95 pesos si es de aluminio. Un corset sacro lumbar de cinco ballenas ronda los 70 pesos y si se requiere uno termoplástico habrá que pensar en no menos de 750 pesos.
El aumento de los precios, junto al incremento de la demanda, llevó a los directivos de la dependencia municipal a implementar un taller dedicado a la construcción y recuperación de este tipo de elementos.
Lo mismo, gastando el 10 por ciento
La experiencia comenzó en noviembre y en sólo este mes se pudieron entregar unas 17 prótesis y órtesis con un beneficio extra: "Podemos hacer las mismas cosas gastando sólo el 10 por ciento de lo que costarían en el mercado. Con el mismo dinero que antes podíamos ayudar a tres personas, ahora atendemos a 30", ilustró Tróccoli.
La diferencia no es menor. "Son personas que nunca podrán acceder a comprar estas cosas en una ortopedia". La puesta en marcha del taller produjo un alivio, aunque los pedidos no cesan. "Es que si no les proveemos las prótesis nosotros, directamente se quedan sin ellas", apuntó la titular del área.
Ante esta situación, la Dirección Municipal para la Inclusión de Personas Discapacitadas decidió lanzar una campaña que denominó Red Solidaria 2002. El objetivo es recolectar sillas de ruedas, muletas, bastones y todo elemento ortopédico en desuso.
Estos equipos que se reciban serán después reparados, adaptados y entregados a las personas que los soliciten.
Quienes estén en condiciones de donarlos, pueden concurrir a Corrientes 2452, de 9 a 12, o comunicarse a los teléfonos 4808660 y 4808799. Allí se podrán contactar con personal municipal que pasará a retirar a domicilio los elementos cedidos.
La Ciudad
