Año CXXXV
 Nº 49.576
Rosario,
martes  20 de
agosto de 2002
Min 3º
Máx 13º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






Balean el auto del recaudador de un súper en intento de robo
Fue interceptado al salir con la plata del fin de semana del local de Rondeau al 1200

Adrián Ramón A. salió a bordo de su auto del estacionamiento de uno de los supermercados para los que trabaja como recaudador. Hizo 30 metros por bulevar Rondeau hacia el centro de la ciudad y rápidamente se dio cuenta de la emboscada que le había preparado una banda de asaltantes. Entonces, a toda velocidad, dio marcha atrás y retornó al lugar del cual había salido mientras los delincuentes gatillaban sus armas. Dos de los balazos alcanzaron al auto y, por milagro, el hombre salvó su vida.
"Guarda que hay tiros", advertían los vecinos de Rondeau y Chiclana pocos minutos antes de las 10 de ayer, confundidos entre el zumbido de las balas y las sirenas de los móviles policiales que llegaban al lugar.
Todo pasó muy rápido. Adrián A., de 33 años, salía del estacionamiento del súper Azul ubicado al 1200 de Rondeau tras haber juntado la recaudación del fin de semana. El trabajador, a bordo de su Fiat Palio, recorre a diario los locales de esa cadena de comercios rosarinos en busca del dinero recaudado. "Quizás lo habitual de su recorrido, o la reiteración de horarios y destinos, hayan hecho que sea una presa tentadora", comentó ayer un investigador que no descartó que "alguien de adentro del comercio haya aportado los datos a los asaltantes".
Lo cierto es que cuando Adrián había hecho unos pocos metros por Rondeau hacia el sur, casi en la esquina con Chiclana, un Fiat Duna bordó se le antepuso en el camino y una moto enduro de alta cilindrada con dos hombres a bordo a la par. "No hubo diálogo, sólo amenazas con un arma que esgrimía uno de los tipos que iban en la moto", contó un vocero de la seccional 10ª.
La intuición de Adrián permitió que el robo no se concretara. "Imaginó que estaba ante un intento de asalto y dio marcha atrás velozmente para volver al estacionamiento del cual había salido", relató la fuente policial. Claro que la maniobra evasiva de Adrián fue también percibida por sus agresores. Entonces el ruido de las balas inundó el bulevar. "Le dispararon en tres oportunidades. Adentro del auto se hallaron dos vainas servidas y se pudo comprobar que uno de los proyectiles ingresó por el capó. Además, una de las ventanillas delanteras fue destrozada por los impactos", aclaró el investigador.
Las vainas halladas no son comunes. Al respecto, el informante dijo que "es un calibre superior al 9 milímetros que utiliza la policía, sería algo que está entra la 45 y la 9. Aún no se hicieron las pericias pero pueden ser de un arma alemana poco frecuente".
Tras el episodio, Adrián tuvo una crisis nerviosa que le impidió aportar datos certeros a la policía por lo que la investigación del hecho no tenía rumbo.



El recaudador evitó los impactos de bala por poco. (Foto: Alfredo Celoria)
Ampliar Foto
Diario La Capital todos los derechos reservados