Arboles caídos, cortes de luz y de teléfonos. Calles anegadas y bocas de tormentas tapadas, fueron algunos de los inconvenientes que desató la tormenta de antenoche. Según el Servicio Meteorológico, que funciona en el aeropuerto de Rosario, entre las 9 del domingo y las 9 de ayer cayeron 76 milímetros de agua. Sin embargo no hubo inundaciones ni evacuados. "No fue una gran tormenta pero provocó varios inconvenientes", indicó Guillermo Bernardello desde Defensa Civil. El funcionario remarcó que durante la jornada trabajaron en forma conjunta la central de emergencia de la repartición, también Control Urbano y Tránsito de Municipalidad. Bernardello detalló que al menos 25 árboles se cayeron por el viento, aunque remarcó que no hubo heridos ni evacuados en Rosario. "Las zonas más afectadas fueron la sur y oeste, aunque hubo reclamos de todos los barrios de la ciudad", señaló. Desde la Empresa Provincial de la Energía (EPE), Juan Carlos Rizza, aseguró que para hoy a primera hora los problemas eléctricos quedarán solucionados. El funcionario indicó que hubo dos problemas con subestaciones de media tensión en el barrio Toba (zona oeste), y también en la zona de Córdoba y Avellaneda que afectó a unos mil usuarios pero que se solucionó ayer a la mañana. También hubo 180 reclamos, de los cuales 65 fueron por cables cortados. "Esos problemas dejaron sin energía a unos dos mil clientes", indicó el funcionario. Lo cierto es que no fueron pocos los rosarinos que durmieron con sobresaltos el domingo por la noche, por problemas eléctricos, telefónicos, y por la contundencia de los sonidos de los truenos.
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