En las últimas 16 semanas el precio del dólar se ubico entre 3,50 y 4,00. La estabilidad del tipo de cambio se dio en el marco de una fuerte liquidación de reservas, caídas en los encajes bancarios, y un desmesurado endeudamiento del Banco Central a través de su política de colocación de letras en el mercado.
En este contexto, el BCRA perdió cerca de 5.500 millones de dólares desde fines de 2001 a la fecha, bajo los encajes del sistema financiero que ahora representan menos del 10% del total de los depósitos del sistema -en el año 2001 el encaje era del 20%- y se endeudó en cerca de 550 millones de dólares a través de la colocación de letras en el mercado.
De esta forma, el gobierno nacional pudo contener el precio del dólar, pero no sabemos cuánto tiempo más podrá perdurar esta política. El gobierno no podrá indefinidamente vender reservas, todo lo contrario. La política de intervención en el mercado de cambios será cada vez más ajustada, ya que en la actualidad las reservas se ubican en apenas 9.000 millones de dólares, y se habría comprometido con los organismos financieros internacionales a no intervenir en el mercado de cambio.
La colocación de letras es muy importante y se pagaron tasas elevadísimas (125% anual) pero ahora se nota una importante caída, ya que el jueves pasado se pago el 70% anual en pesos por una colocación a 14 días de plazo; el 80% anual en pesos por una colocación a 30 días de plazo y el 4% en dólares por una colocación a 14 días de plazo.
Las tasas en pesos resultan muy atractivas, pero son en pesos, cualquier suba importante en el tipo de cambio podría llevar a una gran perdida en dólares a los tenedores de estos productos financieros. Creo que la colocación en dólares es la más conveniente, ya que allí sí podemos tener una tasa real del 4% anual.
No obstante es poco conveniente este tipo de inversión, ya que el BCRA esta lanzado a 14 días con un monto muy grande, y si bien todo indica que cumplirá, no puede dejar de considerarse que si alguna vez está en problemas, enfrentará estos compromisos con mayor emisión monetaria, lo que impulsará la suba al tipo de cambio.
Hasta que el BCRA aguante
En la Argentina de hoy tenemos un dólar político, tarifas públicas a precios controlados y una inflación contenida muy grande. Si a esto le sumamos que esta destruido el sistema financiero, y que no existe la posibilidad de que retorne el crédito, como producto de la inexistencia de un marco legal adecuado para volcarse a la actividad crediticia, las posibilidades de reactivación para el sector secundario y terciario de la economía son muy bajas, y es el sector primario ligado a la exportación el que más se puede beneficiar por ahora.
La conclusión es evidente: dólar estable hasta que la política de aguante del BCRA de vender reservas y colocar deuda a 14 días perdure. Tasas muy atractivas en pesos, pero que pueden dejar de serlo si el peso se devalúa. Las tasas en dólares son interesantes pero hay que recordar que le prestamos al Estado, que en el marco de la inseguridad jurídica existente es siempre un riesgo alto.
Pero con dólar político, tarifas controladas e inflación reprimida, los problemas están a la vuelta de la esquina, y el disparador puede venir de lo social, político o financiero. Seguimos en el marco de una gran incertidumbre, y cuando no se pueden despejar las dudas en materia financiera lo mejor es no hacer nada, junte dólares, si aún puede, y a esperar que se aclare el escenario.