Una mujer cayó por el hueco de un ascensor

Una mujer de 50 años se fracturó el tobillo y sufrió múltiples traumatismos al caer ayer por el hueco de un ascensor en un edificio céntrico. La víctima no perdió la vida por milagro, ya que si bien se precipitó al vacío desde el noveno piso, su caída culminó en el techo del ascensor que, por fortuna, se encontraba un piso más abajo.
El accidente se produjo cerca de las 16 en el edificio ubicado en Mitre 248. A esa hora, Marcela Monzón, una mujer que trabaja como empleada doméstica en el departamento A del noveno piso, se retiraba del lugar luego de cumplir con su trabajo.
Según informaron fuentes policiales, la mujer llamó el ascensor pero el elevador nunca apareció. "Aparentemente, un desperfecto mecánico provocó que la puerta se abriera a pesar de no estar el ascensor en el piso, y la mujer cayera al vacío", indicaron desde la seccional 3ª de la policía.
Por suerte, la caída de la mujer se detuvo un piso más abajo, ya que allí se encontraba el ascensor. Monzón impactó con el techo del elevador, donde quedó tendida con múltiples traumatismos y la fractura de la cabeza del peroné de la pierna izquierda.
Al lugar concurrió una sección de la División Salvamento y Rescate de los Bomberos Zapadores de la Unidad Regional II de policía, quienes luego de algunos movimientos pudieron rescatar a Monzón del hueco del elevador.
Debido al grado de sus lesiones (la mujer tuvo una importante pérdida de sangre, por las heridas) fue trasladada al sanatorio de los Buenos Ayres (Pellegrini 1353) donde quedó internada en terapia. Allí los médicos vieron que, además, presentaba traumatismo de cráneo. Anoche le seguían practicando distintos exámenes neurológicos puesto que había perdido la conciencia luego del accidente. Su condición es estable.
Todas las actuaciones quedaron asentadas en la comisaría 3º, debido a que esa seccional es la que tiene jurisdicción en el barrio. Desde esa dependencia indicaron ayer que "no es habitual" que suceda este tipo de accidentes, aunque los ha habido y con desenlaces fatales.
Es más, en un intento por evitarlos, la Municipalidad reglamentó que todos los ascensores de la ciudad deben tener puertas con visores, para comprobar si realmente se encuentra en el piso. La norma fue tomada justamente luego de algunos accidentes.