Año CXXXV
 Nº 49.567
Rosario,
domingo  11 de
agosto de 2002
Min 5º
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El gasto en salud

En nuestro país, del gasto total de salud, que en porcentaje del PBI está a niveles de países desarrollados, alrededor del 50% se lo llevan los medicamentos. La disyuntiva genéricos sí o no es falsa: la respuesta es sí, pero esto es sólo la punta del iceberg. 1) Hay médicos corruptos como en todas las profesiones. La presión que ejercen los laboratorios es la misma que sobre todos nosotros hacen las marcas de cerveza o cigarrillos: nadie está obligado a nada. Para el grueso de los médicos, una birome o un congreso no es suficiente para transformarse en empleados de multinacionales. 2) Las farmacias hoy en día son un "negocio" más: ¿quién garantiza que se venda el medicamento más barato y no el que hay en stock o el que deje mejor margen a la misma? 3) ¿Los legisladores están dispuestos a continuar con el tema? a) Los laboratorios estatales (que los hay en muchas ciudades del país) producen drogas a mucho menor precio que en el mercado: ¿por qué no autorizan a vender su producción a la población en general? b) En el precio final de los medicamentos hay un enorme costo de "marketing"; se presentan drogas con costosas impresiones bibliográficas pero inútiles científicamente. La fijación de precios es arbitraria: las prácticas oligopólicas de los laboratorios son muy conocidas: en países del Primer Mundo suelen pagar multas multimillonarias por estas patentes. Es obvio que en nuestro país los remedios aumentaron 300% durante la convertibilidad y no paran de aumentar; esas actitudes son moneda corriente: ¿está el gobierno dispuesto a intervenir para llevar los precios a un valor razonable? 4)El Anmat (el ente estatal encargado de vigilar el tema medicamentos) ¿existe? Jamás nos enteramos de su existencia. ¿Podemos los médicos y la población confiar en lo que recetamos y tomamos? En fin, el grueso del gasto en salud se lo llevan los medicamentos, la tecnología cara y las gerenciadoras: la población debe estar tranquila que no son los trabajadores médicos los que obstaculizan un acceso digno a la salud.
Doctor José Rosenzvit


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