La banda de los encapuchados volvió con otro asalto

Fue en Alvarez, donde los ladrones llegaron con un auto robado. Se llevaron dinero y una camioneta

Cuatro delincuentes encapuchados asaltaron una pollería de la localidad de Alvarez, a 30 kilómetros al sudoeste de Rosario, y se llevaron una fuerte suma de dinero para escapar luego en la camioneta del propietario del negocio. Ese vehículo no había aparecido ayer pesar del rastrillaje que realizó la policía durante todo el día. La cantidad de la plata que se llevaron difería según la fuente policial consultada. Mientras algunos voceros decían que lo robado ascendía a 10 mil pesos otros informaban que rondaba entre los 300 y 400.
El robo se produjo alrededor de las 8 en la pollería de Diego Willi, que está ubicada a la altura del kilómetro 12 de la ruta 18. El comercio se encuentra sobre un camino rural a unos 500 metros al oeste de esa vía de comunicación, dentro del distrito de Alvarez, que ya ha sufrido varios de la llamada banda de los encapuchados. Los ladrones, además de irrumpir en el negocio, también se introdujeron en la vivienda del casero del establecimiento, donde robaron algo de dinero.
Los maleantes llegaron al lugar a bordo de un Fiat Uno, que luego se comprobó que había sido robado la noche anterior en jurisdicción de la seccional 2ª de Rosario. Según fuentes policiales, los asaltantes cubrían sus rostros con gorros tipo pasamontañas y todos empuñaban armas de fuego.
Dentro del lugar, además de Willi, se encontraban un par de clientes y familiares del dueño. Todas esas personas fueron obligadas a tirarse al piso y luego encerradas en un compartimiento del local, donde fueron finalmente atadas. Trascendió que la banda se movió con tranquilidad durante todo el tiempo que estuvieron allí.
Fuentes de la subcomisaría 3ª consignaron que se llevaron entre 300 y 400 pesos que Willi tenía guardado en sus ropas y otro tanto que habrían encontrado en la casa del sereno. Pero otros voceros de la Unidad Regional II dijeron a La Capital que el total de lo robado ascendía a 10 mil pesos.
Tras varios minutos en el lugar, la gavilla optó por retirarse y para eso prefirió hacer un cambio de vehículos. "Hicieron una posta", contó un vocero policial con un poco de humor. Uno de los ladrones consiguió las llaves de la camioneta Ford F100 de Willi y entonces todos subieron a ese rodado y desaparecieron con rumbo desconocido, dejando abandonado en el lugar el Fiat Uno.
La policía de Alvarez no reportó que hubiese personas lesionadas y montó un operativo cerrojo en toda la zona sudoeste del departamento Rosario.