Año CXXXV
 Nº 49.563
Rosario,
miércoles  07 de
agosto de 2002
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Dos hombres lo balearon cuando llegó a su casa y quiso ingresar al garage
Asesinaron al vicepresidente de la Unión Industrial bonaerense
El constructor Jorge Fernández Prieto, de 44 años, había intentado evitar un robo. Era socio de Julio Grondona

El vicepresidente de la Unión Industrial bonaerense fue asesinado ayer a balazos cuando al menos dos delincuentes lo atacaron en momentos en que llegaba a su casa del partido de Avellaneda, y se investiga si los ladrones pretendían secuestrarlo o le querían robar el auto. Según un primer peritaje, la víctima, Jorge Fernández Prieto, de 44 años, casado y padre de tres pequeños hijos, murió de un balazo que le impactó en el omóplato izquierdo.
No obstante, se hallaron otros diez balazos en distintas partes de la carrocería del auto BMW bordó que tripulaba la víctima, quien también fue ex presidente de la Unión Industrial de Avellaneda.
Fernández Prieto era un hombre muy vinculado a cuestiones políticas y económicas de la provincia. Durante su velatorio estuvieron ayer, entre otros, el intendente de Avellaneda, Oscar Laborde; el ex ministro de la Producción bonaerense, Carlos Brown, y el presidente de la AFA Julio Grondona, con quien mantenía una profunda amistad.
El empresario era socio de Grondona en negocios relacionados con la construcción y tenía sus oficinas comerciales en la zona de Puerto Madero.
Por el caso aún no hay detenidos, aunque los investigadores policiales y judiciales buscan a recolectores de residuos que recorren esa zona, quienes pudieron haber visto a los agresores.

Una víctima de la inseguridad
El presidente de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires y diputado nacional Osvaldo Rial dijo que Fernández Prieto "fue víctima de la inseguridad y probablemente lo mataron porque se resistió a ser asaltado o secuestrado".
"Lo que pasó es una locura. Yo estuve con él (Fernández Prieto) hasta la 1 de hoy (por ayer); durante la cena otro colega le había aconsejado que vendiera el auto importado que tenía para evitar que lo asaltaran", agregó.
Rial también descartó que el crimen de Fernández Prieto tenga otra motivación "más allá del robo o el intento de secuestro".
Los hechos se iniciaron a las 2 de ayer cuando a bordo de un BMW, Fernández Prieto llegaba a su departamento de la calle San Martín al 900, a la altura de Alsina, en el partido bonaerense de Avellaneda.
La principal hipótesis del caso es que en ese sitio, Fernández Prieto, de profesión constructor, fue sorprendido por delincuentes que pretendían asaltarlo o secuestrarlo.
De acuerdo a las fuentes policiales, al parecer, el hombre pretendía ingresar su automóvil al garage cuando observó por su espejo retrovisor que otro auto se detenía a unos pocos metros.
Como un acto reflejo, Fernández Prieto puso marcha atrás y pretendió escapar. Aceleró su auto pero los delincuentes comenzaron a dispararle.
Al parecer, ya herido de bala, Fernández Prieto manejó su auto y chocó a casi cien metros de su vivienda con un remise Peugeot 505 azul que estaba estacionado.
Por los orificios de bala en la carrocería, no se descarta que los malhechores se hayan acercado al auto luego de la colisión, para rematar al industrial y luego escapar sin robar nada.
Los investigadores también quieren tomar testimonio al custodio del edificio en el que vivía el vicepresidente de la Unión Industrial bonaerense, ya que pudo haber visto a los agresores a través de la filmación proporcionada por las cámaras de seguridad del edificio.
El caso fue calificado como homicidio en ocasión de tentativa de robo y lo investigan el fiscal de Lomas de Zamora Lorenzo Latorre, con personal de la comisaría primera de Avellaneda y la Delegación de Investigaciones de Avellaneda.
En el lugar del episodio, los investigadores secuestraron vainas de los calibres 22 y 38 que son peritados.
"Creemos que al menos eran dos los delincuentes que participaron del hecho", dijeron las fuentes.
Un peritaje determinó que tres balazos impactaron en la parte trasera del auto BMW, cerca de la chapa patente, cinco en la carrocería, uno en el guardabarro, y otro en la puerta delantera del lado del conductor. (Télam y DyN)



Fernández Prieto (izq.) era padre de tres hijos.
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