El secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Paul O'Neill, arribará hoy al país en una visita diplomática, sin expectativas de que pueda anunciar algún plan de salvataje para la Argentina de parte de los organismos multilaterales de crédito. El funcionario del gobierno de George W. Bush permanecerá en Buenos Aires durante 24 horas, se reunirá con el presidente Eduardo Duhalde y mañana se entrevistará con el ministro de Economía Roberto Lavagna, y efectuará una recorrida por centros asistenciales y empresas.
El gobierno espera que la llegada de O'Neill acelere la ayuda financiera que desde hace ocho meses se gestiona con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y existe cierto grado de confianza en convencerlo sobre los avances alcanzados por el país.
La presencia de O'Neill despierta optimismo entre los funcionarios de la Casa Rosada, pese a que ayer se mostraron muy prudentes en sus manifestaciones públicas. El jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, aseguró ayer: "No estamos esperándolo como si se tratara de Papá Noel que venga con la bolsa llena de regalos", sino la visita de "un funcionario muy importante de los Estados Unidos que reiteradas veces ha dicho que quiere conocer personalmente la realidad de esta región".
El embajador argentino en Washington, Diego Guelar, consideró que la llegada al país del secretario del Tesoro norteamericano, Paul O'Neill, será para manifestar "el apoyo" de Estados Unidos al "cierre inmediato" del acuerdo con el FMI que, confía, se firmará "antes de fin de mes".
El representante argentino en Washington recordó que la visita de O'Neill a Sudamérica se previó como "una señal" solicitada por Bush, para ratificar el interés por la región "frente a la oleada que decía que Estados Unidos desvió la atención de América Latina".
El paso por Brasil
O'Neill eludió responder en Brasil, país que junto con Uruguay formó parte de su gira, una pregunta en la que se lo consultaba por qué el gobierno de Estados Unidos no expresaba un apoyo tan contundente a la Argentina como sí lo había hecho con Brasil o con Uruguay, país al que le giró fondos directamente.
"Expresamos nuestro apoyo a las políticas económicas y a las negociaciones con el FMI", sostuvo O'Neill en el marco de su gira oficial por la convulsionada América Latina, mientras una fuerte turbulencia agitó ayer los mercados brasileños debido al auge de los candidatos de la oposición en las encuestas para las elecciones presidenciales, en medio de la visita del funcionario.
El real volvió a caer y acumula una baja en el año del 25,5%. El secretario O'Neill mantuvo una entrevista con el presidente Fernando Henrique Cardoso, a cuyo término aseguró que la reunión "fue cordial y muy útil para entender de primera mano los desafíos y las políticas necesarias para enfrentarlos".
"El éxito de Brasil es importante para el éxito económico de todo el hemisferio", dijo. Paralelamente, el secretario destacó la reciente aprobación del "fast track" (vía rápida) por el Congreso estadounidense, y dijo que, con ello, "nuestra administración tiene ahora una herramienta vital para implementar el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA)".
Según el titular de Economía, Roberto Lavagna, el diferente trato se explica por que Washington quiere evitar que la principal economía latinoamericana y la pequeña de Uruguay terminen declarando un incumplimiento de pagos.
El titular de Economía expresó que "cabe esperar que esta visita represente una oportunidad inmejorable para lograr la comprensión necesaria que permita avanzar hacia el acuerdo final (con el FMI)". En tanto, el secretario privado de Duhalde, José Pampuro, expresó que "en base a que un hombre de la importancia de este señor venga muestra un signo, porque el hecho de venir muestra por lo menos un compromiso", sintetizó.
Apoyo francés
El secretario de Estado de Asuntos Exteriores de Francia, Renaud Muselier, confirmó ayer en un encuentro con Lavagna el apoyo del gobierno francés a la Argentina dentro del FMI.
Muselier realiza su primera misión al exterior como vicecanciller y visitó ayer el Palacio de Hacienda acompañado por el embajador francés en la Argentina, Paul Dijoud. Durante la reunión los funcionarios analizaron el marco económico en el que se desenvuelve el sector privado en la Argentina Muselier ratificó la decisión de las empresas galas de permanecer en el país. También durante el encuentro se trato la situación derivada del retiro del país del Banco Credit Agricole (Ver aparte).