La Municipalidad se lanzará el miércoles a tapar 50 baches por día con cinco cuadrillas descentralizadas. Las tareas, que se realizarán con personal y herramientas propios del municipio, se sumarán al inicio de la tercera etapa de bacheo que comenzó a realizarse en junio con contratistas mediante el sistema de concurso de precios, la que finalizará el 15 de septiembre. Así comenzarán a desaparecer los 6.800 baches que pueblan las calles rosarinas, según un relevamiento que realizó el año pasado la Secretaría de Obras Públicas.
"Queremos dejar la ciudad en condiciones de transitabilidad. Y ante la falta de presupuesto podemos dejar de remodelar una plaza o construir un edificio, de hecho todo eso está parado, pero las tareas de mantenimiento, como limpieza de zanjas, arreglo de veredas y bacheo no se pueden postergar", resumió la titular de Obras Públicas, Patricia Sandoz.
Durante los últimos meses las quejas de los automovilistas por el estado de las calles es una constante. Dicen que los baches están diseminados por toda la ciudad, pero especialmente en las arterias de mayor tránsito, como las avenidas y bulevares. A esto se agrega el deterioro natural de las paradas de colectivos, provocado por la caída del combustible sobre el asfalto. Y tras las últimas lluvias se produjo un desgaste aún mayor del pavimento, que provocó en muchos casos la aparición de una arenilla riesgosa para la circulación de motos y bicicletas.
Ante la necesidad imperiosa de optimizar la red vial de la ciudad, el miércoles comenzará a implementarse por primera vez el sistema de bacheo "descentralizado por administración". Esto significa que se realizarán los trabajos con personal municipal, herramientas y equipos propios sumados a la compra de insumos (asfalto en frío).
Los trabajos se harán por distrito
Las reparaciones estarán a cargo de las diferentes Areas de Servicios Urbanos (ASU) que son cinco en total, distribuidas por distrito. Se trata de sectores que habitualmente se encargan del mantenimiento de espacios verdes, perfilado de calles de tierra, limpieza de basurales y zanjeo. En tanto, ahora se sumará el bacheo.
Cada área tendrá a su cargo una cuadrilla (cinco en total) que saldrá a realizar las tareas orientadas a tapar pozos, "que hay muchos en la ciudad", sostuvo la funcionaria. "Taparemos unos 50 por día", prometió.
Las obras comenzarán por los baches más graves, teniendo en cuenta las dimensiones del pozo, el tiempo que lleva sin mantenimiento, la ubicación y la circulación o no de líneas de transporte.
Sandoz recordó que las reparaciones que saldrán a hacer las cuadrillas municipales se suman a otras tareas que ya se venían llevando a cabo con contratistas.
En efecto, merced a una partida de dinero aprobada por el Concejo y la autorización para contratar empresas sin previo llamado a licitación, la Municipalidad comenzó a encarar en junio la reparación de baches con empresas privadas. Esto sirvió hasta el momento para mejorar aunque más no sea en un mínimo porcentaje el deteriorado asfalto de la ciudad. Así, a mediados de septiembre finalizará la tercera etapa de este plan que suma una inversión total 600 mil pesos; es decir, 200 mil por mes. El último tramo se iniciará el martes cuando se abra el tercer concurso de precios.
El Concejo aprobó la posibilidad de que la Intendencia opere mediante este sistema ya que en los actuales tiempos de devaluación y aumentos indiscriminados se hace imposible convocar a licitaciones públicas debido a que "no hay reconocimiento de variación de costo", dijo Sandoz.
Las intervenciones se iniciaron en la periferia. Básicamente se hizo hincapié en las calles por donde pasan los colectivos del transporte urbano de pasajeros. "Algunas se convirtieron en intransitables", apuntó Sandoz. En rigor, el noroeste de la ciudad es el más problemático. Allí se hicieron en su momento carpetas asfálticas de poco espesor que no soportan el paso del transporte pesado.
Sin embargo, el problema no sólo pasa por los barrios. Después de las últimas grandes lluvias las calles del centro también fueron víctimas de deterioros ostensibles por lo que se iniciaron intervenciones en las calzadas más castigadas. Actualmente se están haciendo reparaciones en Salta y Tucumán.
"En esta situación de emergencia se están atendiendo las cuestiones más graves porque con la crisis económica, la baja de recursos y los incrementos permanentes de los precios de los insumos para el bacheo, se hace difícil poder llegar a una situación óptima", subrayó la funcionaria municipal, antes de agregar que "aun teniendo la misma cantidad de dinero que había en 2001, hoy se podría realizar un 40 por ciento menos de obra".
La Ciudad
