Julio Ricardo Villa decidió abandonar ayer el cargo de coordinador general de divisiones inferiores de Rosario Central para sumarse como ayudante de campo de Osvaldo Ardiles, actual entrenador de Racing. Y la determinación no cayó para nada bien en el seno de la comisión directiva, cuya mesa ejecutiva mantuvo una prolongada reunión desde las 16.30 en la escribanía del presidente Víctor Vesco para analizar la abrupta e inesperada salida del ex futbolista, que había iniciado un ambicioso proyecto de reformulación de la cantera canalla, lo que implicó incluso el comienzo de una depuración de los diferentes planteles. El fastidio dirigencial se pudo comprobar en los rostros de los diferentes integrantes que se autoconvocaron en la oficina de Vesco, no sólo por la esencia de la decisión de Villa sino también por la manera en la que se enteraron, ya que el vicepresidente Ricardo Ferguson, en una eventual visita al Flaco Menotti en el hotel, fue interiorizado de la salida del coordinador. "Villa me comunicó su decisión y argumentó, además de problemas familiares por la lejanía de su hogar, un viejo compromiso que tenía con el Pitón Ardiles", se limitó a relatar Ferguson en diálogo con Ovacion, excusándose en que primero debía trasladar la información al resto de sus pares. Después, ya en pleno encuentro, los directivos analizaron los pasos a seguir con relación a la sucesión de Villa, y si bien muchos de los presentes coincidieron en que el reemplazante debía ser José Coco Pascuttini, finalmente optaron por esperar la opinión del entrenador César Luis Menotti, quien en definitiva había designado al ahora renunciante. Durante el cónclave, Ferguson informó que Menotti manifestó su disgusto por este imprevisto, pero también transmitió tranquilidad y solicitó que ahora sólo había que preocuparse por vencer a Lanús y que en principio él se haría cargo, junto a su ayudante de campo Rogelio Poncini. En este sentido, y evidenciando rápidos reflejos, Menotti citó anoche a las 20 a todos los técnicos de las divisiones inferiores para hablar de la reorganización. Claro que de la reunión de los directivos ya había trascendido por la tarde que Menotti no estaría dispuesto a aceptar la designación de ningún ex jugador de Central, actitud que frenó la iniciativa de varios dirigentes en convocar a Pascuttini. El escribano Vesco, apoyado en la experiencia, dijo: "Lamento mucho la interrupción de un proyecto al que se le dio todo el respaldo". El presidente no ocultó su preferencia por Pascuttini, a quien calificó como "un entrenador serio, honesto y responsable, además lo conocemos muy bien y sabemos qué tipo de persona es". Campagna y Ferguson coincidieron en asegurar que "el Flaco fue muy claro al señalar que por ahora se encargarán él y Poncini, al menos hasta la semana próxima, y después nos sentaremos a analizar este tema". Por su parte, el tesorero Jorge Sauan se deslindó de la cuestión al aseverar que "es un problema del cuerpo técnico, por lo tanto debemos aguardar a que Menotti nos proponga las diferentes alternativas para reemplazar a Villa". Pero en el transcurso del debate entre las autoridades, y como contrapartida, se pudo escuchar que algunos directivos no estarían dispuestos a aceptar a determinados técnicos. "No quiero saber nada con Franciso Fatiga Russo ni con Cayetano Rodríguez ni con Olguín", espetó un asistente al encuentro que hizo temblar las paredes, para luego agregar: "Tampoco podemos aceptar a cualquiera". Lo que es evidente es que los directivos no quieren confrontar con el Flaco Menotti, pero varios de ellos tampoco están dispuesto a permitir otro acto fallido como el de Villa. En conclusión, Central no tiene coordinador en las divisiones inferiores porque Villa se fue. De un lado y del otro existen proscriptos. Menotti tomó el toro por las astas. Los directivos esperan y dudan. La historia continuará. S.F.
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