La comisión de notables enviada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) para asesorar al gobierno en materia financiera reclamó frenar definitivamente el retiro de fondos bancarios por vía de amparos judiciales, dejar de utilizar las reservas para evitar el aumento del dólar, eliminar los bonos provinciales, profundizar el ajuste fiscal, limitar la emisión monetaria, respetar los contratos con las privatizadas y garantizar la autonomía del Banco Central y la impunidad de sus integrantes.
El dictamen de la comisión integrada por funcionarios y ex funcionarios de distintos bancos centrales del mundo, que la semana pasada mantuvo distintas reuniones de trabajo en Argentina, fue difundido ayer por el ministro de Economía, Roberto Lavagna, quien se mostró "satisfecho" con el informe. Para el funcionario, las recomendaciones están en línea con "las políticas en curso" y aseguró que de su lectura surge una coincidencia en torno de temas que considera fundamentales: rechazo a la dolarización, a la hiperinflación como mecanismo de sinceramiento de las variables económicas y oposición a los bonos compulsivos para canjear depósitos atrapados en el corralito.
Tras la difusión del informe por parte de Lavagna, el director gerente del FMI, Horst Köhler, hizo suyo el documento redactado por los notables y destacó que el organismo está listo para comenzar a negociar un programa económico "apenas las autoridades puedan asegurar que podrán implementarlas".
Agregó que "las visiones y conclusiones del panel serán muy útiles para las autoridades de Argentina y para el Fondo, mientras continuamos nuestras discusiones hacia un programa económico para Argentina que contenga la inflación, restaure la estabilidad macroeconómica, y ponga a la economía en el camino de la recuperación".
La comisión de notables, creada para laudar en las diferencias de criterio entre el Fondo Monetario y el ministro Lavagna, refuerza en su dictamen las exigencias que desde el inicio de las conversaciones planteó el organismo internacional. Aún así, incluyó algunas perlitas que permitieron a Lavagna reinterpretar el dictamen a su favor, como el rechazo a la dolarización y a la salida "hiperinflacionaria" del corralito.
Los expertos determinaron de manera tajante que "ni la dolarización oficial, ni la rápida inflación resolvería los problemas profundamente arraigados" de la economía argentina y por el contrario "estrecharía las opciones" para el próximo gobierno.
El grupo de expertos integrado por Andrew Crockett, John Crow, Hans Tietmeyer y Luis Angel Rojo, puso énfasis en cerrar el camino de los amparos judiciales a través de una resolución "temprana y durable".
"La continuación de los amparos simplemente no es compatible con un control monetario adecuado", expresa el trabajo.
La comisión desaconsejó, por otra parte, la utilización de las reservas internacionales oficiales para "absorber la liquidez" y mantener al dólar bajo control.
En el mismo sentido, recomendaron evitar el control del tipo de cambio en el mediano plazo. Pero al mismo tiempo, y en función de una política de anclaje monetario, recomendaron "prestar atención a los movimientos de la moneda local contra las monedas de todos los socios comerciales significativos y no sólo con respecto al dólar".
El método de control sobre el tipo de cambio debe ser, a juicio de los expertos, un programa monetario restrictivo y atado a objetivos de inflación.
A liquidar los bonos
El panel destacó que la existencia de bonos provinciales "no es compatible" con "el desarrollo de un sistema financiero basado en un peso estable". El énfasis estuvo puesto en la necesidad de alcanzar una posición fiscal sustentable. El argumento es que ahora el gobierno no tiene necesidad de tomar fondos del sector bancario para financiar su déficit, pero este se debe a que suspendió el pago de los servicios de la deuda. El problema es que la deuda está creciendo en términos nominales y como porcentaje del PBI. Por ello, resalta el informe, "la Argentina necesitará en los años venideros un resultado fiscal mejor que el simple equilibrio de gastos primarios antes del pago de la deuda".
En cuanto al funcionamiento del Banco Central, llamó a defender su autonomía, aunque no se expresó a favor de garantizarla a través de una modificación legal.
Inmunidad al Central
Los expertos sí advirtieron sobre la necesidad de la inmunidad de los funcionarios del Banco Central, ya que "no debieran estar imposibilitados de realizar aquello que consideran lo más apropiado por temor a las consecuencias personales".
Hacia el futuro, pidió al gobierno "procurar la creación de un clima" en el que los bancos, luego de "aceptar su parte en los costos de sobreponerse a la crisis" sean considerados "socios plenos" en la recuperación de la economía del país.
Al comentar el dictamente, el ministro Roberto Lavagna señaló que las recomendaciones son "compatibles" con su política económica. Respecto del consejo de no usar reservas para controlar el dólar, el jefe del Palacio de Hacienda indicó que su gestión apunta "no sólo a mantener reservas sino a incrementarlas" y destacó el comentario de los expertos sobre la futura vinculación del peso con las monedas principales de socios comerciales.
"El hecho de que no haya ningún punto de disonancia nos hace seguir con nuestra tarea de recuperar la economía argentina", dijo Lavagna, quien reconoció que este informe del panel de notables ayuda a concluir las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional, que ayer envió una misión técnica a Buenos Aires.