Una granada de mano estalló ayer a la madrugada en una discoteca ubicada en el oeste de Austria y frecuentada por adolescentes de la antigua Yugoslavia, dejando un saldo de 27 heridos, precisó la policía.
La policía señaló que la explosión parecía haber sido un ataque deliberado pero todavía no estaba claro por qué alguien arrojó la granada en el club X-Large de la ciudad de Linz, 180 kilómetros al oeste de Viena y cerca de las fronteras alemana y checa.
Ninguno de los heridos estaba en situación crítica, aunque cuatro tuvieron que someterse a cirugía de urgencia por heridas de metralla de granada, dijo el hospital universitario de Linz.
"Parece que la granada de mano fue arrojada o la dejaron rodar. Todo parece indicar que fue un ataque deliberado", dijo un portavoz policial.
La fuente señaló que había alrededor de 40 personas en la sala de fiestas cuando ocurrió la explosión a primeras horas de ayer.
"No pude sentir mi pie ni mi espalda, mi camisa estaba llena de sangre y yo estaba sangrando por un oído", dijo una de las víctimas a la radio austríaca sobre el impacto de la explosión.
Restos de la granada fueron encontrados entre los escombros de la discoteca, popular entre los adolescentes que inmigraron con sus familias a Austria procedentes de la antigua Yugoslavia.
Los jóvenes, de edades comprendidas entre los 17 y los 22 años y oriundos en su mayoría de la antigua Yugoslavia, fueron alcanzados por metralla "que proviene de una granada, es casi seguro", indicó una portavoz de la policía judicial de Linz, Bettina Kreuzhuber.
"Primero creímos que era un accidente, pero encontramos rastros de explosivo y metralla en el lugar de los hechos", agregó.
Según la policía, los cirujanos extrajeron perdigones de acero parecidos "a una especie de metralla" al operar a los heridos. Los más graves sufren heridas internas, indicó una fuente médica en uno de los tres hospitales donde ingresaron las víctimas.
Según Martin Fischmeister, cirujano del hospital general de Linz, dos de los heridos se encuentran en una unidad de cuidados intensivos. El médico precisó que no peligra la vida de ninguno de los heridos. Once jóvenes permanecían hospitalizados ayer, mientras la policía trataba de determinar la naturaleza exacta del artefacto que estalló en la madrugada de ayer en la discoteca X-Large. (Reuters y AFP)
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