Carlos Roberto Moran / La Capital
La afirmación de Elisa Carrió "Reutemann me confesó que le tiene miedo a Menem", como era de esperar, caló hondo entre los allegados al gobernador santafesino, quien no expresó públicamente reacción alguna por los dichos de la diputada nacional. El diputado nacional Angel Baltuzzi, después de hablar ayer con el Lole, cuestionó a la fundadora del ARI, tal como también lo hizo el presidente de la Cámara de Diputados de la provincia, Alberto Hammerly. Este último aseguró que la actitud de la legisladora "fue deshonesta".
"Los justicialistas somos respetuosos de la vida interna de nuestro partido, tenemos discrepancias pero no discutimos cuestiones internas con extrapartidarios", sostuvo Baltuzzi -acompañado por el diputado provincial Jorge Giorgetti- al ser consultado sobre los dichos de Carrió.
En un reportaje que La Capital publicó el domingo, Reutemann dijo que Carrió le había planteado "una jugada peligrosa, peligrosísima" cuando le pidió que la acompañara en los reclamos para que se renueven todos los niveles electivos. "Carrió le echó nafta al fuego, en vez de intentar pacificar generó más conflicto", agregó.
La repercusión nacional que tomaron esas palabras hicieron que la diputada nacional diera su versión de lo que conversó con Reutemann. "No es moral transformar el miedo en difamación", señaló entonces la chaqueña, quien además indicó que el santafesino en un momento le confesó: "Elisa, yo nunca dije que iba a ser candidato y además está Anillaco", en obvia referencia a la participación de Carlos Menem en las internas abiertas del PJ.
La legisladora insistió en destacar el "miedo" al riojano que habría evidenciado Reutemann. Tanto que terminó diciendo que "cuando corté el teléfono comenté: es tanto el miedo a Menem que creo que (Reutemann) no va a aceptar" participar de la disputa intestina del justicialismo, punto que en ese momento el mandatario santafesino no tenía resuelto. Como no podía ser de otra manera, las palabras de Carrió llegaron a la estructura reutemista.
"El gobernador es sumamente discreto y hermético y me parece que es poco verosímil que haya hablado de una cuestión de ese tenor con Carrió; por eso, a tal versión la tenemos que desmentir categóricamente", dijo Hammerly.
Para dar más fuerza a la desmentida, Hammerly explicó que estaba presente cuando Carrió llamó al gobernador a su despacho, y no a la inversa, como la legisladora manifiesta en su carta abierta.
"La actitud de Carrió fue deshonesta, porque no se puede mentir irresponsablemente en cuestiones tan serias", sostuvo el titular de la Cámara baja santafesina, quien agregó que a su juicio la diputada "es una persona mediática, que siempre está provocando situaciones que le permitan estar en el candelero".
En otro orden, al ser consultado sobre la posibilidad de que Reutemann revea su negativa a la precandidatura presidencial, Baltuzzi pidió prudencia, al tiempo de aceptar que aunque el gobernador no llegue a cambiar su palabra "lo que pueden cambiar son las circunstancias, los contextos" y recordó que Henry Kissinger, secretario de Estado de Richard Nixon, "decía que lo único previsible de la historia es que es impredecible".
En cuanto a apoyos a otras candidaturas, Baltuzzi pidió que se "decanten las aguas y dejar pasar un poco el tiempo".
Baltuzzi, legislador nacional y presidente del PJ santafesino, estuvo ayer con Reutemann, sin que trascendieran los temas que se analizaron. El gobernador también recibió a la senadora Roxana Latorre y el diputado Jorge Obeid, quienes no hicieron declaraciones a la prensa.
A su vez, Giorgetti, quien acompañó al gobernador en el viaje a Buenos Aires cuando negó su candidatura, volvió a admitir también la alternativa de que "si cambian las condiciones políticas Reutemann podría rever su postura".
Tal como lo había dicho horas antes a este diario, Giorgetti señaló que se necesita conformar un amplio frente patriótico "para que exista previsibilidad y un acompañamiento importante por parte de distintos sectores políticos y quizás así Reutemann cambie de opinión".
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