Pablo F. Mihal / La Capital
Sin prisa pero también sin pausa Duendes no detiene su andar y sigue ganando. Ayer derrotó a Gimnasia y Esgrima por 42 a 12 en un partido clave y continúa liderando en soledad la Zona Campeonato del Torneo Regional del Litoral a sólo tres fechas para que éste finalice.
Más allá del juego repetitivo y de los pocos recursos que mostraron los mens sanas, el triunfo de Duendes es harto justificado: tuvo una defensa que fue impasable (más aún cuando los ataques llegaban a la línea de 22 metros), concentración, tranquilidad para manejar los tiempos y por sobre todas las cosas un trabajo tremendamente expeditivo para sacar las diferencias hasta quebrar a su rival fueron los argumentos más sólidos.
Porque si bien Gimnasia arrancó mejor no tuvo esa solidez necesaria para rematar la jugada en forma satisfactoria, cosa que sí hizo Duendes que en la primera de cambio no dudó. Una avivada de Escalante (de muy buen desempeño) terminó en try y a partir de ahí el partido cambió.
Los verdinegros ganaron muchos metros utilizando el eje profundo y cuando no pudieron seguir avanzando por esa vía apelaban a sus backs para tratar de sorprender, aprovechando además la falta de tackle de los mens sana. Esto pudo notarse con notoriedad en el primer try de Farré.
El juego colectivo comenzó a ir de menor a mayor. El trabajo del pack de forwards local marcó otra de las diferencias que hubo entre los dos equipos. Dominaron en el scrum casi a voluntad haciendo retroceder a los visitantes varios metros. En el line, la lucha fue bastante pareja e inclusive Gimnasia sacó un pequeño rédito pero con eso solo no le alcanzó.
El lugar elegido por Duendes para empezar a desarticular la defensa auriazul fue el centro de la cancha y no las puntas como se podía prever. Si bien los de Las Delicias, sobre todo en el primer tiempo, dispusieron de pocas pelotas, las que tuvo las aprovecharon al máximo. Cuando se decidieron a avanzar, lo hicieron firme ganando varios metros. Gimnasia, en tanto, tuvo la pelota pero lateralizó mucho el juego y por más que trató de sumar pases en cada avance no logró el objetivo primordial que era ganar terreno.
Una vez que Duendes sacó la diferencia y ya con el bonus en su poder, se dedicó a regular el partido. Si bien se concedió algunas licencias no permitió que Gimnasia se agrandara y le complicara la tarde. También se dio tiempo para algunos lujos, como el drop que intentó Gonzalo García desde mitad de cancha y que quedó muy cerca.
Con el marcador y el reloj en contra Gimnasia se vio obligado a descontar pero poco pudo hacer. Y en ese contexto, Duendes supo esperar y terminó por quebrar a su adversario, sellando una victoria amplia e inobjetable.
Otro dato que no es menor y que no se puede dejar de lado es que Duendes viene presentando en forma regular el mismo equipo. Salvo por alguna lesión o por alguna convocatoria, los nombres son siempre los mismos y eso con el transcurrir de las fecha hizo que el equipo no sólo se solidificara sino que también sus piezas tengan un accionar mucho más aceitado. Esto trasladado a un juego que todos interpretan hacen del equipo de Las Delicias un rival potencialmente peligroso.
Duendes ganó y sigue aferrado a su libreto, al paso a paso que le está dando sus frutos y que le dibuja a sus hinchas fecha a fecha una sonrisa cada vez más amplia.
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La Ciudad
