Los ministros de Salud de Francia y de Estados Unidos fueron blanco ayer de ataques de militantes de las organizaciones de lucha contra el sida durante la Conferencia Internacional sobre la enfermedad que se celebra en Barcelona. Miembros de seguridad formaron un cordón humano de protección para el secretario norteamericano de Salud, Thommy Thompson, mientras una treintena de militantes intentaba subir al estrado desde donde pronunciaba un discurso en medio de una fuerte silbatina y abucheos. El discurso de Thompson, que se refería a las medidas adoptadas por Estados Unidos para luchar en el territorio norteamericano y en el extranjero contra la propagación de la enfermedad fue imposible de escuchar a pesar de que insistió y lo leyó hasta el final. Los militantes le reprochan a la administración del presidente norteamericano George W. Bush -de quien Thompson fue el funcionario de rango más elevado en representarlo- que recomiende la abstinencia más que el uso de preservativos para tratar de contener la propagación del mal y de rechazar los programas de distribución gratuita de jeringas para los toxicómanos. Poco antes, el ministro francés de Sanidad, Jean Francois Mattei, fue también increpado verbalmente por militantes de Act Up, una organización radical de lucha contra el sida. Los militantes de Act Up reprocharon al ministro el hecho de que no prometa nada diferente al anterior gobierno francés, a lo que el ministro respondió: "Por el momento, seguimos en la continuidad del Estado". (AFP)
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