Washington. - El presidente estadounidense, George W. Bush dejó abierta la posibilidad de un ataque militar contra Irak, al reiterar que su país empleará "todos los medios a su alcance" para acabar con el régimen de Saddam Hussein. Bush afirmó que está barajando todos los aspectos de su política sobre Irak: "Estoy involucrado en la planificación militar, en la planificación diplomática y en la planificación financiera".
Sin embargo, Bush se negó a comentar una información aparecida la semana pasada en The New York Times, que afirmaba que el borrador del plan militar preveía un ataque con decenas de miles de marines y soldados, que invadirían Irak desde Kuwait. En las conversaciones entre el secretario general de la ONU, Kofi Annan, y el ministro iraquí de Exteriores, Naji Sabri, Irak no aceptó la propuesta de permitir el regreso de los inspectores de armas de la ONU después de tres años y medio.
u Un ataque en secreto. The New York Times afirmó el viernes que el ejército estadounidense había puesto a punto en secreto un documento en el que se prevé un ataque masivo contra Irak, que involucraría a centenares de aviones de combate y alrededor de 250.000 soldados. Visiblemente irritado por esta fuga de información, el presidente Bush la atribuyó a un responsable de bajo nivel "que quería mostrar sus conocimientos" y señaló que las personas "no deberían especular sobre el deseo de este gobierno de alcanzar un cambio de régimen".
La administración Bush, que ubicó a Irak en "un eje del mal", exige el retorno de los inspectores de la ONU a ese país, del que sospecha que desarrolla armas de destrucción masiva, bajo la amenaza de atacar militarmente al régimen iraquí. Ahora bien, al término de dos días de conversaciones en Viena, Irak y la ONU dieron testimonio el viernes del fracaso de las mismas tendientes a lograr el regreso de los inspectores a Irak, de donde fueron retirados a fines de 1998.
Bagdad atribuye a Washington el fracaso de su diálogo con la ONU, y lo acusa de buscar una escalada para justificar su plan destinado a derrocar a Saddam Hussein, mientras que EEUU se declaró "no sorprendido" de este fracaso.
u Rusia, en contra. Rusia, por su parte, advirtió ayer que ataques aéreos contra Irak tendrían "consecuencias catastróficas", al tiempo que el diario británico Financial Times sostuvo que el gobierno de Saddam Hussein está afianzando sus relaciones comerciales con Ucrania para obtener tecnología y armamento militar para una eventual guerra.
El vocero de la Cancillería rusa, Alexandre Iakovenko, declaró mediante un comunicado que "estamos persuadidos de que el uso sin fundamentos de la fuerza contra Irak tendrá consecuencias catastróficas para Medio Oriente". El diplomático ruso subrayó que Moscú "no dispone de informaciones concretas sobre eventuales planes secretos de dirigentes estadounidenses para alejar del poder al presidente iraquí Saddam Hussein".
En tanto, el ex inspector de armas de Naciones Unidas (ONU), Timothy McCarthy, dijo al Financial Times que la ex república soviética se esforzó en establecer compañías ucranianas en territorio iraquí, relacionadas con la adquisición de tecnologías armamentísticas en favor de Hussein. "Durante algunos años existió una relación intensa en el área de defensa y tecnología entre Ucrania e Irak, que se disolvió. Y todo parece evidenciar que estos peligrosos lazos comenzaron nuevamente", declaró McCarthy al Financial Times. (AFP, DPA y Télam)