Con la presencia de sus flamantes adquisiciones, los mediocampistas Ezequiel González y Matías Donnet, y pensando en la probable contratación del delantero Raúl Estévez, más el retorno del lateral Hugo Ibarra, el plantel de Boca Juniors se entrenó ayer en el predio de Casa Amarilla.
El Equi González y Donnet cumplieron su segundo entrenamiento en Boca bajo la atenta mirada del técnico Oscar Tabárez, que incluso los incluyó durante algunos minutos en la práctica de fútbol que desarrolló el plantel.
Los dos trabajaron primero con Alberto Márcico, ayudante de campo de Tabárez, y posteriormente se sumaron a un partido que enfrentó a equipos con pecheras amarillas y naranjas mezclados entre titulares y suplentes.
Los amarillos formaron con Dulcich; José María Calvo, Rolando Schiavi, César González y Clemente Rodríguez; Javier Villarreal, Alfredo Cascini, Gustavo Pinto y Carlos Tévez; Marcelo Delgado (luego Ezequiel González) y Héctor Bracamonte.
En tanto, los naranjas jugaron con Mauro Astrada (después Abbondancieri); Juan Forchetti, Joel Barbosa, Nicolás Burdisso y Molina; Gabriel Christovao, Sebastián Battaglia, Cristian Giménez y Omar Pérez (Donnet); Cángele y Ariel Carreño.
La práctica también fue presenciada desde un costado del campo de juego por el delantero Guillermo Barros Schelotto, quien deberá utilizar muletas durante los próximos 25 días tras la operación que le realizaron el viernes por una lesión grave en el tobillo derecho. La ausencia del mellizo Barros Schelotto se prolongará hasta octubre, de allí que la directiva boquense se halle abocada a la búsqueda de refuerzos (ver aparte). (DyN)
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La Ciudad
