Editorial

El desempeño fiscal

Desde hace tiempo se viene señalando que uno de los grandes errores que se cometieron en materia de política económica fue el de no haberse implementado a tiempo modificaciones en el gasto público. Un estado sobredimensionado y con un nivel de eficiencia muy bajo obligaba a contraer créditos año tras año para poder sostenerlo, lo cual derivó lógicamente en un crecimiento de la deuda a cifras imposibles de afrontar. En este contexto, las provincias tuvieron un rol gravitante, y algunas más que otras, ya que la responsabilidad ante la crisis no fue pareja. En este sentido, se sabe, Santa Fe fue una de las provincias que mejor entendió la coyuntura por la que se atravesaba y, en consecuencia, supo llevar adelante una administración verdaderamente racional, iniciativa que le permitió, entre otras cosas, no tener que emitir bonos para sobrellevar su déficit. Un estado de situación al que más de un ciudadano de otra provincia desearía volver.
Corroborando esta tendencia del último año, un informe publicado ayer por La Capital da cuenta de que en la primera parte del 2002, de los tres distritos más grandes de la Argentina -Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba- nuestra provincia fue la que mejor desempeño fiscal obtuvo. Concretamente, el informe señala que logró dar vuelta un resultado negativo de casi 100 millones en el 2001 a un superávit de 70 millones de pesos en el 2002. Hubo un fuerte recorte del gasto primario (110,8 millones de pesos, 14.2 %) y una suba del 8,3 de los ingresos totales, resultado de una caída de la recaudación de sólo el 11,3 % (menor que Córdoba y Buenos Aires) y una compensación de la Nación con un incremento del 33.7 % en la transferencia de recursos.
El informe abunda en cifras bastante elocuentes y datos comparativos que sirven para comprender algunas de las razones sobre las que se funda la credibilidad que la figura del gobernador posee, tanto en el ámbito nacional como en el exterior del país. Aquellos recortes que produjo criteriosamente, por los que debió sobrellevar no pocas críticas y protestas, hoy se vuelven en cifras positivas, haciendo analogías con otros distritos. Y constituyen una mejor base administrativa para poder avanzar en la reconstrucción del Estado provincial, en el que, obviamente, aún restan materializar grandes reformas.