El negocio de la salud en el país entró en un proceso de transformaciones a partir de una crisis económica que afecta por dos lados: la baja del poder adquisitivo de la población y el aumento de los costos de las prestaciones, sobre todo a causa de la escalada de los precios de los insumos importados. Frente a la pérdida de afiliados por la imposibilidad de afrontar las cuotas, las empresas de medicina prepaga se ven obligadas a bajar los costos pero sin castigar los niveles de cobertura. Con este marco, la prepaga local Medycin implementó un nuevo sistema: la utilización del médico de cabecera, imitando el modelo público de seguridad social que se utiliza en Estados Unidos o Inglaterra, pero adaptado a un sistema privado. El presidente de Medycin, Fernando Riccomi, explicó que el nuevo sistema "tiene un médico de cabecera, que no siempre es un clínico o un generalista, puede ser también un especialista; y donde atienden distintos prestadores en los cuales el afiliado se puede tratar". El ejecutivo indicó que la empresa mantendrá los planes que tiene hasta el momento, pero ahora sumará esta nueva alternativa que "es un sistema donde le damos cabida a los afiliados que tienen que ir a un sistema de cobertura médica de menor costo por la crisis, pero manteniendo todas las prestaciones establecidas en la PMO que fija el gobierno". Riccomi explicó que "el sistema de médico de cabecera contiene la estructura de costos porque se le da al afiliado todo lo que necesita, pero no más de lo que necesita". El directivo dijo que se busca optimizar el gasto en salud, de manera que se ahorren las consultas y no se hagan estudios de más. El médico de cabecera analiza el caso y luego deriva al paciente hacia la especialidad correspondiente, dentro de la cual el afiliado puede elegir al médico que desee dentro de las instituciones prestadoras incluidas en el plan de la prepaga. Riccomi señaló: "Estimamos que este sistema tiene que estar produciendo entre un 30 y un 40% de reducción de gastos". Agregó que esta oferta "no existe en el país" y consideró que esta puede ser una tendencia en el sector. "En general todas las prepagas necesitan una alternativa de ofrecer al público planes de menor costo que hoy es una necesidad de mercado", dijo. En materia de precios, el directivo indicó que el promedio de la medicina prepaga está pagando una cuota que ronda los 50 pesos, dentro de una banda que va de 45 a 60. "En esta banda están las empresas más conocidas, y después hay una segunda banda que están en promedio de 35 a 42 pesos, que suelen ofrecer una cobertura cerrada. El promedio de cuota del plan que estamos lanzando está en 30 pesos, y a una persona menor de 25 años le va a estar costando sólo 20 pesos", afirmó. Riccomi pronosticó que "muchas otras empresas van a ir a un sistema como este, armar planes acordes a las circunstancias de la Argentina que hoy no tiene los niveles de ingresos per cápita que tenía antes".
| Fernando Riccomi es el titular de la empresa Medycin. | | Ampliar Foto | | |
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