Año CXXXV
 Nº 49.525
Rosario,
domingo  30 de
junio de 2002
Min 5º
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Rugby
Los Pumas volvieron a perder con Sudáfrica

Los Springboks no dejaron dudas y siguieron demostrando su paternidad. A pesar de sus errores y de que en varios pasajes del partido Los Pumas lo tuvieron a su merced, los sudafricanos consiguieron el triunfo en el último partido de la minigira que los argentinos realizan por tierras sudafricanas.
Si bien el marcador es un tanto abultado, habida cuenta lo expuesto por ambos conjuntos en el desarrollo del partido, los Springboks justificaron el resultado en la excelente utilización de la pelota en los metros finales cuando se lanzó al ataque.
Los Pumas, lejos de ser simples sparring, saltaron a la cancha y con mucha actitud acorraló al dueño de casa contra su ingoal y lo obligó a defenderse. En esos pasajes tuvo el control de la pelota, iniciativa pero careció de definición.
La lenta salida de la pelota fue al igual que los problemas en la pelotas aéreas, otro de los aspectos negativos de Los Pumas y una de las causas que permitió la levantada de Sudáfrica, que a los 12' avisó de su peligrosidad cuando André Pretorius quedó a centímetros del ingoal y la pelota se le fue para adelante.
Si bien los dos equipos cometieron muchos errores, Sudáfrica pasó a dominar el panorama gracias a la labor posicional de su apertura y cuando tuvo la chance de herir, lo hizo. Pretorius rompió el cero y marcó los primeros tres puntos de los 24 finales con que terminaría su producción individual.
Minutos después llegó el try de Jacobs (pass forward mediante) el que sumado a los errores que cometían los argentinos en esos momentos hizo que Sudáfrica ganara en confianza e hiciera sentir su potencial.
Habían transcurrido tan sólo cuatro minutos cuando los Springboks volvieron a herir, esta vez a través de Davidson, culminando una jugada donde los sudafricanos hicieron del apoyo un culto.
Fueron diez minutos (de los 20' a los 30') donde el local fue una tromba y sacó una diferencia considerable. Se puso 17 a 0 arriba pero no contaron con la levantada de Los Pumas.
Los dirigidos por Loffreda y Baetti comenzaron a atacar y vieron sus frutos. El try de Nacho Fernández Lobbe bajo los palos marcó el camino. El equipo dinamizó el juego, le perdió el respeto y empezó a acortar distancias.

La percusión sudafricana
En el complemento, Gonzalo Quesada anotó un nuevo penal (en total aportó 19 puntos producto de 5 penales y 2 conversiones) y puso a Los Pumas a un solo punto, pero se erigió como el estratega que necesitaban Los Pumas. Esto se notó ya que hubo ventaja sudafricana en todo el partido, reflejada en la destreza y percusión para atacar por todos los frentes.
Así, inmediatamente, llegó el try de Terblanche para poner las cosas en orden. Los minutos siguieron corriendo y Pretorius siguió facturando. Sudáfrica se fue alejando y el cansancio empezó a dejar sus huellas.
En el altiplano sudafricano, los Springboks impusieron un ritmo demoledor ante unos Pumas argentinos que sintieron en la segunda parte el esfuerzo sobretodo al bajar el rendimiento de su tercera línea.
Un try penal concedido a Argentina sobre la media hora, encendió una esperanza que pronto se apagó. Terblanche y Conradie anotaron los suyos y redondearon una nueva victoria sudafricana, la octava en ocho presentaciones.



Ignacio Cortelo hace una de karate frente a James Dalton.
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