Con el aliciente de nevadas anticipadas y la ventaja comparativa que ocasionó la devaluación del peso argentino, el centro de esquí del cerro Catedral, en Bariloche, Río Negro, es una buena opción para estas vacaciones. El programa es el esquí durante todo el día y cuando cae la tarde nada mejor que disfrutar de un chocolate caliente con torta en las confiterías del cerro.
Las expectativas de nieve son más que alentadoras. En los últimos veinte días se vienen produciendo recurrentes nevadas en la cordillera, lo que suma día a día más visitantes.
El Cerro Catedral - en la región del Parque Nacional Nahuel Huapi, a 19 kilómetros de la ciudad- no sólo satisface las necesidades de los esquiadores, sino que cuenta con otros entretenimientos que aseguran la diversión de quienes concurren. Entre otros, festivales de música y espectáculos como polo y vóley sobre la nieve, además de bajadas de antorchas.
Es posible la práctica de parapente, mountain bike, trekking y paseos en motos de nieve. Durante la tarde, la cita es en alguna de las confiterías del cerro, donde se puede disfrutar de un chocolate caliente con tortas y dulces regionales.
La propuesta de pistas es variada. Está "Punta Princesa", considerada fácil, con gran variación en su topografía, que va de plano hasta pendientes medias. En cambio, "De la garganta", corre en medio de un cañadón con contrapendientes laterales, está considerada por su dificultad como difícil.
"Pista seis o del bosque" es aconsejable para esquiadores avanzados. Su recorrido es emocionante por los variados accidentes del terreno. "Amancay" transcurre entre árboles y un maravilloso panorama para aquellos que disfrutan de la naturaleza. Por último está "Carlitos", una de las más complicadas del cerro, es generalmente helada y con fuertes pendientes.
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La Ciudad
