En un brote místico, un demente mató al dueño de un geriátrico para insanos

También hirió con un cuchillo a una enfermera y a otro paciente. Dijo que lo hizo "por mandato de Dios"

Buenos Aires.- Un hombre de 65 años, interno de un geriátrico para enfermos mentales, asesinó de una puñalada al dueño del establecimiento, hirió a otro anciano y a una enfermera, y fue detenido por la policía. El hecho ocurrió en José León Suárez, partido bonaerense de San Martín, y los investigadores sostienen que "el acusado cometió el ataque en medio de un brote místico".
"Escuché a Dios y me dijo que el dueño del geriátrico quería quedarse con mis bienes. Hice todo por mandato de Dios", relató el acusado cuando la policía llegó al establecimiento para detenerlo y luego internarlo.
Probablemente, el fiscal José Guozden, a cargo del caso, pida el sobreseimiento del asesino por entender que es inimputable, es decir que no comprendió la criminalidad de sus actos.
El episodio ocurrió en el geriátrico Los Amigos donde, según la policía, Emilio Luis Tidoni mató de un cuchillazo al dueño del establecimiento, identificado como Vicente Horacio Alvarez, de 69 años; hirió al paciente Santos Toribio Arias, de 48, y a la enfermera Nélida Rosario Palavecino, de 44.
Según las fuentes, todo comenzó a las 4.20 de ayer cuando el interno, que se encontraba alojado en una habitación del segundo piso, bajó al comedor que está ubicado en el subsuelo del edificio y tomó un cuchillo tipo tramontina.
De acuerdo con la investigación, el paciente, que está internado por demencia senil, localizó a uno de los socios propietarios del geriátrico, que dormía en un sillón, y sin mediar palabra le aplicó una puñalada a la altura del corazón, lo que le provocó la muerte en el acto.
En ese momento, otro interno que observó la situación intentó calmar al paciente y le dijo: "¿Qué estás haciendo? ¿Estás loco?". Entonces el agresor atacó también al interno y lo hirió de un cuchillazo, por lo que tuvo que intervenir la enfermera Palavecino, que fue agredida al ser rozada con el arma que utilizó el atacante.

Con el cuchillo en la mano
Fuentes del caso explicaron que hasta el arribo de la policía, el homicida caminó por todo el establecimiento e incluso regresó a su habitación sin dejar de sostener el cuchillo en sus manos. "Cuando llegamos todavía tenía el cuchillo en su poder y hubo que forcejear hasta dominarlo y quitarle el arma. Solo decía incoherencias y alegó haber actuado por un mandato de Dios", sostuvieron los agentes.\"Sólo hablaré con Dios y con el juez", dijo el acusado antes de ser trasladado a la Clínica Santa Mónica, donde quedó alojado con custodia policial.\Tanto la identidad del paciente asesino como el interno herido se preservan porque se trata de enfermos psiquiátricos. En tanto, de Vicente Alvarez se supo que era uno de los socios dueños del geriátrico y que vivía en Mar del Plata. "Al menos una vez por semana venía al geriátrico y siempre se dormía en el sillón", contaron fuentes judiciales.\Los investigadores evaluaron que "por milagro, el paciente no atacó a los otros 29 internos psiquiátricos alojados en el lugar". (Télam)