Jubilosos, los habitantes de Corea del Sur se despertaron ayer saboreando el triunfo sobre Portugal, lo que les valió el pase a octavos de final por primera vez en la historia. Tan contentos como los italianos, que declararon su alegría por no tener que enfrentarse a Portugal.
Algunos enfrentaron algunas resacas como resultado de las celebraciones en las que también cantaban "Dae Han Min Guk" (República de Corea) en las calles y en bares. El matutino Sports Today tituló "Ronda de 16", mientras que el JoongAng Ilbo encabezó: "El avance de Corea del Sur a la segunda ronda abre el camino para el futuro de Asia".
La presidencial Casa Azul atribuyó el triunfo al trabajo de equipo, así como a las calurosas muestras de apoyo del público. "Nuestra gente y los jugadores combinaron sus fuerzas para hacer realidad el logro de estar en la segunda ronda", explicó un comunicado de la Casa Azul.
"Celebramos también la entrada del coorganizador Japón a la segunda ronda junto con Corea del Sur", agregó.
La policía estima que cerca de tres millones de personas, la mayoría de ellas con la camiseta roja del equipo, reunidas en 260 lugares en todo el país, siguieron el partido ante Portugal en pantallas de televisión gigantes, según JoongAng Ilbo. (Télam)