Los diputados justicialistas del denominado Grupo Talcahuano, conocidos por su proyecto a favor de la renuncia masiva de los legisladores -una idea del tucumano Ricardo Falú-, comenzarán a tomar contacto con la Iglesia y otras instituciones sociales para sumar apoyos a favor de la reforma política. Según informaron sus integrantes, el objetivo del grupo es incluir nuevas iniciativas a sus futuros pedidos de sesiones especiales, como la convocada la semana pasada, cuando por falta de número se frustró la intención de aprobar la renuncia general de los mandatos. Las entrevistas planeadas son un abierto desafío a la intención de la conducción del bloque, liderado por Humberto Roggero, que pretende mantener puertas adentro la discusión sobre el tema. Por tal motivo, los justicialistas del Grupo Talcahuano, un nombre que hace referencia al domicilio del estudio de abogacía donde se encuentran los legisladores, aseguraron que su estrategia apunta a "abrir una puerta para romper el cerrojo de la bancada".
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