El hacedor del video rechaza las críticas y dice que no se abusa de personas vulnerables. "Hay gente que piensa que esto es una explotación, pero lo lamento, son nuestros amigos. No tienen techo y aman las cámaras y nuestra compañía", protesta Beeson, quien se encontraba desocupado cuando iniciaron el proyecto. "Es una buena diversión, una mezcla de humor y elementos chocantes que funciona, mucha gente los disfruta", afirma.
| |