Boca: Era previsible, Riquelme faltó a la cita

El volante no fue a la primera práctica xeneize

La gran incógnita quedó develada y con ella también un grueso conflicto en puertas. Tal como lo había deslizado, casi a modo de formal anuncio, el talentoso mediocampista Juan Román Riquelme no se presentó al primer entrenamiento de Boca y que marcó el inicio de la pretemporada que finalizará en los Estados Unidos.
Sí algo de revuelo pero en modo alguno sorpresa causó la resonante ausencia. Es que Riquelme había señalado días atrás que no jugará más en Boca, en gran parte por su dramática situación familiar por el secuestro de su hermano Cristian y posteriores advertencias que el asunto no quedaría allí, y por otro lado debido a la enorme frustración deportiva derivada de varias transferencias malogradas al exterior.
De todos modos, la actitud, que podría claramente ser interpretada como de rebeldía, en tanto trasunta negativa a asistir al trabajo por el cual se le paga, podría generarle algún tipo de sanción por parte de la directiva boquense, como ser la intimación vía "carta documento" para que se presente a entrenar junto al resto de sus compañeros.
Cabe recordar que el crack tiene contrato firmado con el club hasta junio del 2003, a partir de cuando podría quedar con el pase en su poder, de seguir estancadas las negociaciones domésticas, intrincadas las del exterior y al parecer irreversible su enfrentamiento con el presidente Mauricio Macri.
Para peor, desde Brasil se conoció ayer la noticia de que el Cruzeiro, antes interesado en el astro de Boca, ahora descartó la posibilidad de contratarlo.
El equipo de Belo Horizonte alegó que no está en condiciones financieras para abonar los 4 millones de dólares, sólo en concepto de salario por un año de contrato exigidos por Marcos Franchi, el "duro" representante de Riquelme, quien a punto de cumplir 24 años también es pretendido por Cruz Azul de México.