Central Córdoba ya piensa en el futuro. Después de absorber el descenso de categoría, los de Tablada van a encarar el torneo de Primera B de una manera totalmente distinta a las últimas temporadas. Tras haber arribado a un acuerdo con el empresario Eduardo Bermúdez, quien será el encargado de manejar el fútbol profesional, los charrúas apuntan sus cañones para conseguir lo más rápido posible el regreso a Primera B Nacional. El primer pedido de Bermúdez, antes formalizar el acuerdo, era la continuidad del cuerpo técnico que encabeza Ricardo Palma y por eso tras reunirse con el empresario, el entrenador confirmó que junto a su ayudante de campo, Rodrigo Palma, el profesor Luis del Ré y el profesor Marcelo Geralnik firmaron un contrato por las próximas dos temporadas. Otro de los datos que confirma la seriedad del proyecto es que Bermúdez resolvió abrir 20 cajas de ahorro, en las que mensualmente serán depositados los sueldos de los jugadores, lo que les permitirá a los dirigentes de la entidad de la zona sur manejar las arcas con mayor tranquilidad y además conformar distintos grupos de tareas con la intención buscar apoyo de sponsors o la organización de distintas actividades para conseguir un mayor ingreso de dinero para ir solucionando algunos de los problemas que arrastra. La seriedad con la que se está manejando el proyecto hizo que Fabián Cancelarich, Walter De Lemos, Juan Valiente, Leandro Oliva, Ricardo Melli, Emiliano Yocco, José Cárdenas, Silvio Iuvalé y Marcos Santos también decidieran seguir en el club y que esta tarde se incorporen Cristián Calabrese y Pablo Robisso. En definitiva, y cuando la historia parecía que iba a ser totalmente distinta, Córdoba tiene una buena base para encarar la próxima temporada y con la consigna de ser protagonista en un torneo muy competitivo.
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