| | Santa Fe: los hechos del 25 de Mayo pasaron al ámbito judicial
| Carlos Roberto Moran / La Capital
El fiscal santafesino Héctor Millen le solicitó al juez correccional Raúl Candioti que investigue los hechos ocurridos el 25 de Mayo en la Catedral Metropolitana, cuando los manifestantes forzaron las vallas de contención y obligaron al gobernador Carlos Reutemann y a otros funcionarios a salir por una puerta lateral del templo y dejar el lugar en diversos vehículos. En esa circunstancia también el ministro Carlos Parola, quien salió por la puerta principal de la Catedral, recibió insultos y escupitajos. El fiscal aclaró que hizo la presentación de oficio y que con su acción intenta saber si se cometió delito y que se establezcan y delimiten las responsabilidades de los funcionarios que tuvieron a su cargo el operativo de seguridad montado en esa ocasión. En recientes declaraciones, publicadas por La Capital, el diputado nacional Julio Gutiérrez manifestó que lo ocurrido frente a la Catedral al término del tedéum "fue una vergüenza" y que no había ningún juez ni fiscal que hubiesen actuado de oficio luego de los acontecimientos aludidos. Ahora eso se ha modificado porque hay una causa abierta. En su presentación Millen solicita a Candioti que requiera informes a la Jefatura de Policía así como a los medios de comunicación que estaban cubriendo los actos oficiales conmemorativos de la Revolución de Mayo y que, consecuentemente, también registraron el momento en que un sector de manifestantes superó las vallas de contención mientras reclamaban la presencia del gobernador. El magistrado correccional le confirmó a este diario que ya secuestró algunos videos y que ha comenzado a tomar otras providencias similares. Hasta el momento no ha determinado si citará a algún funcionario, aunque se interpreta que de hacerlo debería convocar al subsecretario de Seguridad Pública, Enrique Alvarez, a quien se lo considera como el principal responsable del operativo. También es factible que el juez, llegado el caso, cite al jefe de la policía provincial, comisario general Ricardo Milicic, y a las autoridades policiales que tuvieron a su cargo el desplazamiento de los efectivos que fueron ubicados en la plaza de Mayo y sus alrededores para controlar el orden, estimados entre 250 y 350 uniformados.
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