El equipo de técnicos del Ministerio de Hacienda de Santa Fe está trabajando contrarreloj para definir los detalles del acuerdo fiscal que la provincia firmará con la Nación. Aunque no trascendió qué día sellará el pacto el gobernador Carlos Reutemann, en Hacienda saben que los tiempos se acortan después de lo resuelto el fin de semana en La Pampa, donde la mayoría de los gobernadores se comprometieron a poner su firma para respaldar la gestión del presidente Eduardo Duhalde.
Cabe destacar que Reutemann es uno de los mandatarios provinciales que más se resistió a acercar posiciones con el gobierno nacional en esta materia, en virtud de que la Nación ha incumplido sistemáticamente todos los últimos pactos firmados con los Estados provinciales.
"Nosotros continuamos trabajando y mañana (por hoy) también lo haremos", aseguró a La Capital el secretario de Finanzas de Santa Fe, Miguel Asensio, quien dijo que la rutina que tiene con su equipo y el de técnicos de la Nación en pos de analizar el acuerdo sigue su curso.
Asensio reconoció que en función de lo sucedido el fin de semana en la cumbre de Santa Rosa "el camino a seguir es hacia una posible suscripción" del pacto fiscal para reducir el déficit de las provincias en un 60 por ciento, una de las exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI) para otorgar asistencia financiera a la Argentina.
Solá prometió firmar
Ayer, el bonaerense Felipe Solá, uno de los mandatarios que resistió hasta ahora la firma del pacto, dijo que "será suscripto en el transcurso de esta semana". Como contrapartida, el gobernador de la provincia vecina se aseguró una transferencia de fondos de 1.500 millones de pesos.
De esta forma, Buenos Aires será la primera de las tres provincias "grandes" en firmar el acuerdo en su totalidad, si se tiene en cuenta que Córdoba sólo suscribió un "preacuerdo", como aclarara días atrás su ministro de Producción y Finanzas, Juan Schiaretti, y Reutemann expuso públicamente su negativa.
"No estamos presionados"
Al ser consultado sobre si se sienten presionados por el dramático pedido de Duhalde respecto a que se acortan los tiempos para sacar al país a flote, Asensio fue contundente: "No nos pone ningún tipo de presión, tenemos todas las proyecciones realizadas y de lo que se trata es de acordar la más seria para sustentar el acuerdo".
Los técnicos santafesinos que están abocados a sacarles punta a los números y a las condiciones que impone el pacto barajan distintas hipótesis de nivel de actividad económica, precios y comportamiento del tipo de cambio. "Todas estas variables son muy sensibles y dinámicas, eso lo sabemos, pero Santa Fe seguirá peleando por un acuerdo serio que sea cumplible para las dos partes".
Al igual que lo ha hecho en muchas oportunidades el ministro de Hacienda, Juan Carlos Mercier, Asensio planteó que "queremos firmar algo que sea viable, queremos llegar a un acercamiento en las hipótesis macroeconómicas, no tiene sentido trabajar para firmar algo que, como ya ha sucedido, nadie cumple".
La provincia de Santa Fe adoptó una posición bastante más conservadora que la del propio gobierno nacional sobre las hipótesis macroeconómicas en las que debería sustentarse el acuerdo: "Si la provincia piensa que la actividad económica puede caer un siete u ocho por ciento y la Nación cree que sólo caerá un tres por ciento, por ejemplo, dejaremos en claro que las proyecciones macroeconómicas las hace el gobierno nacional y nosotros adscribiremos", precisó el secretario de Finanzas santefesino, a la vez que apuntó que "en última instancia la decisión (de firmar o no el pacto con el gobierno nacional) es política, y eso lo sabemos".
La Ciudad
