A partir de ayer el Banco Municipal comenzó a vender dólares por cuenta y orden del Banco Central (BCRA), lo que produjo una cola de unas dos cuadras, menos gente en las casas de cambio y un gran alboroto entre quienes se refugian en el billete verde. Este mercado oficial no operaba en Rosario porque sólo se concretaban operaciones en la Capital Federal, con lo cual en la plaza local se compraba sólo el dólar libre. El límite de compra en el Municipal es de u$s 500 y el mínimo es de 50. En el primer día el banco mantuvo una cotización al cierre de $3,37 para la compra y $3,45 para la venta, en tanto que en las agencias la franja fue de $3,50 y $3,70, para las dos puntas.
La iniciativa de operar por medio del Central partió de las autoridades del Municipal. En la primera jornada se concretaron unas 600 operaciones que concretaron un total de unos 200 mil dólares y las transacciones rondaron un promedio de u$s 400 por persona. En esta modalidad el cliente debe presentar su DNI y el cajero completar una serie de datos antes de vender la divisa.
El interés de la gente
Daniel Pavicich, titular del banco, expresó que la operación había superado las expectativas: "Concretamos negocios por unos 200 mil dólares, pero la gente evidentemente tenía muchas expectativas", expresó.
Desde las 6.30 una importante cantidad de público inició la fila para comprar dólares y a media mañana la cola llegaba casi hasta la esquina de Sarmiento y Santa Fe, unos 200 metros. Pasado el mediodía se repartieron 300 números y ya cerca de las 18.30 entraron al banco los últimos compradores.
Durante el día no se vio a los coleros, que abundan en las filas de las entidades que operan por cuenta del Central en Capital Federal. Este rebusque de la crisis consiste en cobrar $8 para comprar para un tercero y de esa forma romper el límite de compra a particulares. Sí en cambio pudo verse a algunos dateros de los arbolitos, quienes seguramente estarán evaluando oportunidades de negocio.
Ante la afluencia de público, la idea del Municipal para hoy es entregar 350 números en la apertura, a las 10 de la mañana, a los que quieran operar, 250 a particulares y 100 a clientes del banco. "En un primer momento pensamos que nos íbamos a quedar sin billetes, así que bajamos el límite a u$s 300 por persona, pero después volvimos a los u$s 500. Esto lo tendremos que manejar hasta que podamos calcular los montos a comercializar", sostuvieron desde el Municipal.
En las colas el tiempo de espera se hacía interminable y los cálculos pasaban de la dolarización a la pesificación. "Por cada quinientos dólares te ahorrás cien pesos, es negocio", sostuvo un comprador. Los que menos tiempo pasaron en la cola rondaron las siete horas. "No está nada organizado, con un sólo cajero tiraron casi todo el día", se quejaban.
En las agencias de cambio locales la divisa cerró en $3,50 y $3,70 para las dos puntas, pero la gente se volcó masivamente al Municipal. "Fue un día tranquilo, la gente vendió y no se desesperó tanto. Evidentemente esta operación nueva va a sacar clientes de las agencias", comentó un operador.
Los dólares del canal BCRA tuvieron un aumento del 1,47 por ciento (cinco centavos en valor absoluto). En tanto las entidades que no adhieren a la operatoria del Central se mantuvieron en los $ 3,50 para la compra y $3,55 para la venta.
Los arbolitos y los coleros dominaron la jornada y una vez más se tejieron todo tipo de anécdotas sobre los testaferros que compran para terceros: "Hay un tipo que tiene contratados diez coleros y hace una buena diferencia con el oficial y el paralelo" explicó un cambista porteño.
Por el lado de las tasas no se registraron mayores variantes, siempre con elevadísimos rendimientos para tratar de captar depósitos en medio de la iliquidez del sistema financiero.
Los depósitos a plazo fijo de 7 a 59 días accedieron a una tasa promedio del 6,52 mensual, equivalente al 78,16 por ciento anual, mientras que, en ese orden, las inmovilizaciones de dinero en las cajas de ahorro recibieron un 0,74 y 8,81 por ciento.
La Ciudad
