Cipolletti.— El presunto asesino de tres mujeres en un laboratorio de análisis clínicos de esta ciudad está identificado y se trata de un ex paciente de una de las víctimas, la psicóloga Carmen Marcovecchio, según lo confirmaron ayer fuentes judiciales.
El juez de General Roca, Juan Torres, aseguró en horas del mediodía que la investigación está centrada en un ex paciente de Marcovecchio identificado como David Sandoval, de 26 años, quien no tiene parentesco alguno con el primer demorado en el caso, de idéntico apellido, aunque si mantenían una relación de amistad.
En diálogo con la prensa, el magistrado dijo que el autor de la masacre "es uno solo", pero que "habría otro implicado en el hecho" con una participación secundaria y esta sería la vinculación del hasta ayer único apresado.
También reveló que la única sobreviviente, Ketty de Bilbao, de 70 años, sufrió una herida de bala en la cabeza y que, aunque su estado "es delicado", se está recuperando.
Esta fue la primera oportunidad desde que el jueves ocurrió el triple homicidio que el juez mantuvo contacto con la prensa. En dependencias de la policía judicial de esta ciudad, donde instaló su despacho para hacerse cargo de la investigación, Torres dialogó con los periodistas durante 10 minutos.
En la ocasión reveló que están buscando a quien considera el autor del crimen, aunque evitó brindar más detalles del sospechoso. "Lo estamos buscando por todos lados" se limitó a señalar.
David Sandoval habría sido asistido hace 10 años por la psicóloga Marcovecchio cuando estaba internado en el hogar de menores Santa Genoveva, de la ciudad de Neuquén.
El juez informó que David mantiene una relación de "amistad" con el único detenido hasta el momento en la causa, que también es de apellido Sandoval (Orlando), alias Clavo, quien el año pasado recuperó su libertad después de una condena de 14 años que cumplió por hechos graves.
Torres afirmó que el autor de los asesinatos "es uno solo" pero que "habría otro implicado en el hecho" aunque no como responsable material.
La sobreviviente baleada
El juez confirmó además que la única sobreviviente, Ketty de Bilbao, de 70 años de edad sufrió una herida de bala en la cabeza. "Es un disparo efectuado con un arma chica", dijo el magistrado para señalar que si bien la víctima se recupera "su estado es delicado".
Torres no pudo aún tomarle declaración testimonial a la mujer y se estima que lo hará cuando los médicos la den de alta. Ketty de Bilbao permanece internada en una sala de terapia intensiva del hospital de Cipolletti con una fuerte custodia policial, teniendo en cuenta que es la única testigo que podría reconocer al asesino.
La mañana de ayer, durante tres horas, la policía allanó un caserío ubicado en calle Perito Moreno 155 del barrio Arévalo de esta ciudad, a sólo tres cuadras del laboratorio donde fueron asesinadas la bioquímica Mónica García, de 28 años; la bancaria y paciente Alejandra Carbajales, de 30; y la psicóloga Carmen Marcovecchio, de 40 años.
La policía revisó minuciosamente las cinco viviendas que componen este inquilinato, demoró a uno de sus moradores, buscó las armas utilizadas por el homicida e incluso rastreó el lugar con perros de la policía llevados al lugar.
"Buscamos armas o rastros porque sospechamos que cuando huyó en bicicleta del laboratorio después de asesinar a sus víctimas, el asesino pudo haber pasado por este lugar porque tiene comunicación con la calle de atrás para eludir a quien pudiera haberlo visto", señaló uno de los investigadores.
El juez Torres informó que está trabajando durante todo el día en la sede de la policía judicial de Cipolletti, aunque no tiene una afectación exclusiva en esta causa.
"Es una situación complicada y por eso estamos trabajando con todas las fuerzas para sacar adelante esta investigación y encontrar al autor", aseguró el magistrado. (Télam)