Adherentes a los partidos de izquierda realizaron anoche un banderazo frente al Cabildo para repudiar las políticas "pro FMI" y exigir la renuncia del presidente Eduardo Duhalde. También instaron a una "confluencia" de las organizaciones de izquierda y de los movimientos populares, para "salir de la crisis de representativa" por la que atraviesa el país.
En medio de banderas argentinas, pancartas y carteles con el reclamo "que se vayan todos", representantes de la Izquierda Unida, el Frente para el Cambio, el Partido Comunista, el Movimiento Patria Libre y el Partido Socialista Auténtico anunciaron que el próximo 29 de mayo harán "cien cortes" en distintos puntos de la Capital Federal para que "se vaya Duhalde".
Anticiparon, asimismo, que adherirán a la medida de fuerza que tiene prevista la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) para esa fecha, aunque le pedirán a Víctor De Gennaro que convoque a la "unidad de todos los sectores para realizar un paro de unidad nacional".
"Que se vayan todos"
Bajo una estricta custodia policial, que cortó el acceso a la Plaza de Mayo y calles aledañas, los manifestantes repudiaron -al igual que lo hicieron horas antes los trabajadores del Estado- las "políticas del ajuste del Fondo" y repitieron hasta el cansancio el grito acuñado en diciembre último: "Que se vayan todos, que no quede, ni uno solo".
Alicia Castro explicó que la convocatoria fue para "reafirmar, 192 años después, la decisión del pueblo a ser una nación y no una colonia". "Una nación económicamente libre, socialmente justa y políticamente soberana", puntualizó la dirigente de extracción sindical que hace algunos días puso una bandera de Estados Unidos sobre el escritorio del presidente de la Cámara de Diputados.
Tras indicar que "el presunto crédito del FMI, condicionamientos mediante, producirá más ajuste, más hambre más miseria y más desocupación", la diputada advirtió que "los prestamistas y los usureros no vienen a dar, sino a sacar".
Calificó, además, de una "típica negociación oscura de la corporación política" la media sanción de la ley de subversión económica en Diputados.
Consultada sobre si este era el primer paso para la unidad de los partidos de izquierda, Castro fue terminante: "Lo más importante es la unidad del pueblo, la de los dirigentes viene después". (DyN)