El director francoargentino Gaspar Noé causó revuelo anteayer a la noche entre los asistentes al Festival de Cine de Cannes con la exhibición de su película "Irreversible", la que fue calificada por los críticos de "fea", "injustificada" y "morbosa". Con grotescas imágenes de extrema violencia y una larga y detallada violación, ya se esperaba que "Irreversible" causara polémica en el festival de cine más famoso del mundo, pero los que asistieron a una función especial para los críticos dijeron que la encontraron más repugnante que escandalosa. "Es morbosa. Me estaba preguntando por qué el público se quedó tanto tiempo", dijo Edwin Jahiel, un crítico y profesor de cine de la Universidad de Illinois, en conversación con Reuters. Mucha gente, en efecto, abandonó la sala antes del final. "La única razón por la que no me revolvió completamente el estómago es porque no he comido en todo el día, y ahora estoy contento de que no lo hice", agregó. Protagonizada por la sensual actriz italiana Mónica Bellucci y su esposo en la vida real, Vincent Cassel, "Irreversible" examina la pérdida del control de un hombre a través de las drogas y cómo reacciona cuando le informan sobre la violación y la desfiguración de su novia. El guión consiste casi en su totalidad en palabrotas y la escena en la cual Bellucci es violada dura cerca de 10 minutos. Exhibida en forma anticronológica -la asombrosamente violenta conclusión primero y las secuencias que llevan al espectador de vuelta a los hechos después-, el filme comienza con una chocante escena en el club sadomasoquista de homosexuales llamado Rectum. "Creo que la gente se sintió violada", dijo Patrick McGavin, un crítico del diario estadounidense Chicago Tribune. "Es fea y hay muchas cosas en ella que son injustificadas. Es profundamente perturbadora. Va demasiado lejos". Pero dijo también que "la estructura de la cinta por lo menos ofrecía un contexto en el cual era imposible concebir el grado de la ira, la violencia y el deseo ardiente de venganza de parte del personaje principal". Joao Lopes, un crítico del periódico portugués Diario de Noticias, coincidió, pero dijo que no basta para redimir el filme. "Es superficial. No es tan chocante como pretenciosa y muy simple", opinó. Noé es famoso por su estilo chocante-grotesco, y Bellucci, que deleitó el público el año pasado en "Malena", vaticinaron ya antes del estreno que la película iba a dividir al público. "Es una explosiva mezcla de violencia y éxtasis, de monstruosidad y poesía", dijo en una entrevista la estrella de 33 años.
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