La ansiada reforma política

Quieren 83 concejales menos en la provincia

Una comisión de diputados santafesinos ya elaboró un despacho y se esperan avances para estos días

Jorge Sansó de la Madrid / La Capital

La reforma política en la provincia ya no está inmovilizada. Empujada por el justicialismo en la Cámara de Diputados, subió un primer escalón y la reducción de los concejos municipales ya tiene despacho de la comisión de Asuntos Comunales. Y, se promete, esta semana hará lo propio la comisión de Asuntos Constitucionales de ese cuerpo, interesado ahora en convertir en ley antes de que termine el corriente mes o comienzos del próximo la tan mentada reforma.
La iniciativa no cuenta todavía con el respaldo de la oposición radical que propicia otro mecanismo y no la reducción numérica de los cuerpos colegiados temerosos, dicen, de resentir la representación democrática.
La UCR abrió el sábado último el análisis interno de la cuestión durante un plenario realizado en su comité de la ciudad capital de la provincia.
Con la cómoda mayoría que el PJ posee en ambas Cámaras legislativas (en el Senado con quórum propio), el oficialismo se prepara para dar luz a las enmiendas que -en base a los acuerdos nacionales entre el gobierno central y las provincias- buscan transparentar y abaratar el funcionamiento político del Estado.
El ministro de Gobierno, Esteban Borgonovo, a poco de jurar el cargo, envió dos proyectos a la Legislatura. El primero propiciando la reducción numérica de los miembros de los concejos municipales y el control de sus gastos, aunque sólo limitado a Santa Fe y Rosario. El otro, todavía sin pronunciamiento de comisiones, instala mecanismos de participación semidirecta de la población.
De cumplirse sin contratiempos los planes del peronismo, la provincia verá reducidos sus concejos municipales en 83 ediles. Idea que ahora cuenta con el respaldo de la aludida comisión de Asuntos Comunales que no sólo limitó dicha poda a los municipios de primera categoría (Rosario y Santa Fe) sino que extendió la misma a los de segunda, como dice el despacho firmado por su presidente, Ricardo Alvarez, y los diputados oficialistas Elida Schachner, Mónica González y Juan Domingo Demaría.
Se abstuvieron de firmar los miembros radicales Ricardo Giacosa y Juan Carlos Cardelli, pero no emitieron un despacho de minoría.
Igual temperamento adoptaron los miembros de la comisión respecto de un proyecto presentado por el justicialista Carlos Paganini propiciando la revisión de las ciudades que actualmente -y conforme el censo poblacional- no estarían en condiciones de mantener tal rango. Ello importaría, automáticamente, la modificación de sus instituciones. Sobre esta iniciativa, los oficialistas Alvarez, Schachner, González y De María volvieron a pronunciarse favorablemente, los radicales Giacosa y Cardelli nuevamente se abstuvieron pero el demoprogresista Miguel Bullrich presentó un despacho de minoría rechazándolo.
En cuanto a la disminución de las bancas en los concejos municipales, la comisión de Asuntos Comunales introdujo modificaciones al mecanismo de aplicación del mismo respecto del contenido en el proyecto enviado por Borgonovo.
La idea plantea que tales cuerpos no tendrán seis sino cinco miembros de base y esa cantidad no se alterará hasta los 35 mil habitantes. A partir de allí, de aprobarse lo sugerido por la comisión, se sumará una banca por cada por cada 30 mil habitantes más o fracción no inferior a 15 mil.
En Santa Fe y Rosario se partirá de 10 bancas (no 9 como pretende el Poder Ejecutivo) para los 200 mil habitantes. Luego sumarán uno por cada 60 mil o fracción no inferior a 30 mil. Para ponerlo en números actuales, el Concejo Municipal de Rosario pasará de tener 42 a 21 ediles y el de Santa Fe, de 23 se reducirá a 13.