Marcelo Minichetti / La Capital
"A fin de año me retiro", confesó a La Capital Leo Mattioli tras los dos shows que ofreció en el teatro El Círculo. El cantante tropical, que se encuentra en su momento más alto de popularidad y que sobreviviera en el 2000 a un gravísimo accidente, también dijo que últimamente está pensando mucho si esta vida es una prueba. "Quizá uno se muere y lo olvidan y para qué sirvieron tantas cosas", deslizó interrogándose en voz alta antes de anunciar que ésta será su última temporada sobre los escenarios.
El compositor santafesino que impuso letras de alto contenido erótico y un estilo melódico que lo diferencia de los demás grupos tropicales, ofreció en la provincia seis recitales en una misma noche, hecho que confirma su poder de convocatoria.
-¿Con qué género musical comenzó su carrera artística?
-Empecé a los 20 y hoy tengo 29. Siempre estuve con el género tropical y con el mismo Grupo Trinidad. El contenido de las letras me define y la diferencia es que las hacemos con un ritmo tropical. Esas mismas melodías y letras tranquilamente se pueden hacer como melódico, sin ponerle cencerro y timbaleta. Acabo de grabar dos temas, sin ritmo tropical, que vamos a mandar a Europa.
-¿Está buscando abrir mercados?
-Sí, nuestra música está sonando en varios países donde ha entrado por la parte melódica. En julio nos vamos a Europa donde tenemos una gira por Escocia, Italia, Suiza, Suecia, y otros países.
-¿Esperaba llenar el Gran Rex y Obras en Buenos Aires?
-Sí. Era lo que soñábamos y es lo que sueñan todos los artistas. Creo que por todas las ganas que le pusimos a esto pudimos llegar y vivir lo que está pasando hoy.
-¿Qué opina de la cumbia villera y del elogio que algunos grupos hacen de distintos delitos?
-Me divierte. Yo me río y hago de cuenta que miro una película. Gracias a Dios no me drogo, ni robo, ni nada por el estilo. Me siento identificado por los temas románticos que involucran a una pareja. Me puede llegar a afectar la mujer que deja a un tipo porque quizá eso me haya pasado alguna vez a mí, pero no uno que esté preso por robar un banco. Eso no me afecta porque nunca estuve en una situación así y no me va ni me viene. Me divierte y nada más.
-¿Las mujeres lo acosan?
-No sé... (risa). Tenés que ir a mis shows y ver lo que pasa con las mujeres y después sacar tus propias conclusiones... (risa) No me gusta hablar a mí de eso; decir que las mujeres me siguen...
-Junto al Grupo Trinidad sufrió un grave accidente, ¿qué actitud tiene frente a la muerte?
-Es jodido ese tema, porque... (duda) fijate que tengo un pensamiento muy raro últimamente, que me está dando vueltas en la cabeza desde hace mucho tiempo. Mirás a tu alrededor, a tus espaldas y te comparás, -no en lo profesional- con lo que hace otra gente y a veces te da que pensar en qué va a terminar uno... Adónde vamos a parar. Ultimamente pienso cosas como que esta vida es sólo una prueba, no sé, uno no sabe dónde termina todo el sacrificio que está haciendo. Quizá uno se muere y lo olvidan y, entonces, para qué sirvieron tantas cosas. Hay mucha gente que está obsesionada por eso. Yo trabajo por mis hijos, por mi familia, por la gente que cree en mí, pero prácticamente conocí la muerte, no sabía si iba a vivir. Estaba agonizando y entendía las palabras cuando decían que no me daban vida.
-¿Estando inconsciente entendía lo que decían los médicos sobre su estado?
-Claro, estaba en coma, pero entendía cuando decían: "Le damos 24 horas..." Esas cosas cosas te dan mucho que pensar, mucho, mucho, mucho... Como que, si me pasara lo peor en este momento, no sé si me acordaré de lo que hoy vivo. Pensar en la muerte es muy jodido. Si practicara lo que pienso me sentaría a esperar debajo de un árbol, pero no lo puedo hacer porque tengo alrededor a mucha gente que no piensa como yo y trabajo por esa gente.
-¿Si la gira por Europa es exitosa cambiaría su estilo de hacer música?
-No, acá seguiré siempre igual. Quizá cambie afuera, pero acá seguiré siempre igual. Ahora estamos preparando temas y a un pibe nuevo porque este es el último año de Leo Mattioli....
-¿Por qué será el último año?
-Porque a fin de año me retiro. Ojalá que la necesidad o la gente no me hagan retirar antes, pero, si todo sigue como ahora, tengo ganas de retirarme.
-¿Está hecho económicamente o está cansado?
-Estos son esos pensamientos raros que te dije antes. Tengo cuentas pendientes como todo el mundo, pero los pensamientos de uno vuelan.
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