Año CXXXV
 Nº 49.473
Rosario,
jueves  09 de
mayo de 2002
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Punto de vista: El regreso de los grandes héroes

Fernando Toloza / La Capital

"El Hombre Araña" se convirtió en un ídolo para la mayoría de los superhéroes al batir el récord de recaudación de todos los tiempos y embolsar en tres días 114 millones de dólares, una cifra cercana a las 140 millones que costó el filme. El triunfo del arácnido marca el regreso de los superhéroes a la gran pantalla, de donde habían sido desterrados después de algunos filmes donde sus superpoderes no les sirvieron para evitar el fiasco.
Las razones del éxito no son del todo claras. El Hombre Araña siempre fue considerado como un héroe de segunda línea y, para colmo, nacido hace nada más que cuarenta años, en oposición a los veteranos Superman y Batman, que hoy ya podrían declararse, a pesar de sus tibias relaciones con las mujeres, abuelos.
La clave del triunfo radica en mostrar un héroe al que las cosas no siempre le salen bien y que es capaz de hacer reír al espectador. Sin embargo, esa risa no sirve para descalificarlo sino para hacerlo más humano, y aunque torpe, jamás es del todo ridículo como lo han sido Batman y Superman.
Si la humanidad y la espontaneidad son las claves del Hombre Araña para triunfar, sus sucesores en la pantalla grande van a tener que trabajar mucho para lograrla. El éxito del arácnido les abre las puertas pero después el trabajo tendrán que hacerlo ellos solos.
Con "El Hombre Araña" los estudios comenzaron a perder sus temores a las películas con superhéroes. Entre los proyectos en marcha se cuentan "El increíble Hulk" y "La Mujer Maravilla". Los dos tuvieron suerte en TV pero si en el cine de hoy rige la espontaneidad, ni el hombre verde ni la pulposa amazona tienen en su haber esa virtud.
Hulk tiene un poco más a favor si sus rabietas se consideran como espontáneas y no como un estallido esquizofrénico, producto del miedo y el resentimiento. La Mujer Maravilla, en cambio, jamás podrá hacer creíble que es espontáneo el regalo de un avión invisible que le hicieron sus amigas amazonas, y mucho menos si la insípida Sandra Bullock es la protagonista del filme.


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