El secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, llamó a los 189 miembros de la organización a construir un "mundo a medida de los niños", en el marco de la primera jornada de la sesión especial sobre la infancia de la Asamblea General. "No hagamos pagar a los niños por nuestros fracasos nunca más", enfatizó el secretario general. Más de 70 mandatarios y ministros de todo el planeta se reunieron ayer en Nueva York para discutir hasta el viernes sobre la situación actual de la infancia en el mundo y evaluar lo logrado en los últimos doce años, desde la Cumbre de la Infancia de 1989. Annan sostuvo que "los adultos le han fallado a la niñez del mundo al permitir la malnutrición, las enfermedades y los abusos contra ellos. Recordó que los derechos básicos de la niñez son, entre otros, tener acceso absoluto a la educación y crecer libres de la pobreza, el hambre, las infecciones y los abusos en su contra, así como de la explotación.
Annan dijo que estos derechos les han sido negados a millones de niños en el mundo. "Estos derechos son obvios", dijo Annan. "Y sin embargo, nosotros, los adultos, le hemos fallado a la niñez y debemos corregir nuestros fallos".
La sesión especial sobre la infancia había sido programada en un primer momento para septiembre del año pasado, pero fue suspendida a causa de los atentados en Washington y Nueva York del 11 de septiembre.
La reina Sofía de España, el líder sudafricano Nelson Mandela y su compañera mozambiqueña, Graca Machel, participaron en la sesión, a la que asistió asimismo entre otros el actor Roger Moore, que fue embajador de buena voluntad de Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para al Infancia), organización que auspició la sesión especial.
Una niña boliviana, Gabriela Azurdy Arrieta, de 13 años, tomó la palabra en la Asamblea General de Naciones Unidas, para reclamar, en nombre de los niños del mundo, "un mundo apropiado para nosotros y queremos que se nos tome en cuenta, dijo ante los representantes de unos 180 Estados miembros de la ONU.
Con una voz segura, la primera niña en la historia de Naciones Unidas que toma la palabra ante la Asamblea General, delineó ante los líderes mundiales el mensaje de los niños reunidos en el Foro de la Infancia, que se celebró el fin de semana pasado, previo a la apertura de esta reunión. "Somos niños y niñas que nuestras voces no se oyen", dijo Gabriela, ante los jerarcas del mundo, a los que pidió, en nombre de los niños del orbe, "un fin pacífico de los conflictos, en vez de usar la fuerza".
"Los niños y niñas somos las víctimas de la explotación y el abuso. Somos niños y niñas de la calle, somos niños y niñas de la guerra, somos huérfanos del sida. Se nos niega una educación de buena calidad, servicios de salud, somos víctimas de la discriminación política, económica, cultural y del medioambiente, y es hora que se nos tome en cuenta", insistió la pequeña.
Argentina y sus horas más difíciles
En su discurso, el presidente del Consejo Nacional de la Niñez, Adolescencia y Familia de Argentina, Norberto Liwski, expresó que el país está viviendo "las horas más difíciles de su historia democrática". "Mi país atraviesa la crisis económica y social mas grave de su historia contemporánea", dijo. Esa gravedad se manifiesta en una "inequitativa concentración de la riqueza, en la crisis de un sector financiero ajeno a toda definición de la dignidad humana y en un asfixiante endeudamiento externo", afirmó.
La situación de los niños y adolescentes que viven en el seno de familias desocupadas son hoy el rostro mas dramático y descarnado, sostuvo. El funcionario subrayó que estas son las víctimas mas visibles de la situación actual. Seis de cada diez niños argentinos crecen y se desarrollan por debajo de la línea de pobreza, mientras que un millón y medio de adolescentes están excluidos de la educación y el trabajo, explicó. (AFP y DPA)