La número dos del Fondo Monetario Internacional (FMI), Anne Krueger, dio a conocer ayer un plan del organismo para la Argentina y puntualizó en ese marco como valores primordiales los catorce puntos del acuerdo firmado por la Nación y las provincias hace dos semanas. Ese plan, enfatizó la funcionaria del organismo multilateral, deberá adoptarse con "rapidez y convicción" si es que el país pretende recibir ayuda del FMI.
A menos de una semana de que el país se exponga a caer en default ante los organismos internacionales de crédito (ver aparte), la vicedirectora del FMI salió a plantearle al gobierno que no puede haber más demoras en la toma de decisiones clave. En un encuentro financiero realizado en Washington, Krueger advirtió que "hay que perfeccionar el plan dándole una forma sostenible" y planteó cuáles son los pasos más importantes que deben contemplarse: restablecer el orden del sistema bancario, del sistema de pagos y el mercado de divisas, en un entorno de "políticas macroeconómicas sólidas, que es fundamental y la parte medular del plan para restablecer la confianza".
Para el FMI resulta esencial que se apruebe en forma urgente una reforma a la ley de quiebras y que se derogue la ley de subversión económica para restablecer la confianza de los inversores. Krueger aseguró que esas medidas "tendrán que adoptarse esta semana y se adoptarán", y también juzgó como importante que "las provincias dejen de emitir papel que circule como moneda".
Krueger manifestó estos conceptos al hablar en la Trigésimo Segunda conferencia de "Nuevas Realidades del Hemisferio" llevada a cabo en un hotel de Washington y transmitida a Buenos Aires a través de una teleconferencia en la embajada de los Estados Unidos.
El hecho de que el FMI haya admitido que está trabajando sobre los pasos que debe seguir el gobierno argentino, lo cual fue ratificado por el subsecretario del Tesoro norteamericano, Peter Fisher, enojó al presidente Duhalde quien consideró "inexplicable" que el organismo esté cumpliendo esa tarea, con el aval de los países más industrializados del mundo. De todos modos, consideró desde el punto de vista positivo que se trata de una forma de demostrar que están colaborando con la Argentina.
Duhalde acusó recibo de las declaraciones de Fisher: "Es inexplicable porque no le corresponde al organismo hacer planes económicos; quiero creer que sus expresiones han sido sacadas de contexto y que tienen que ver con el programa que nosotros hemos presentado al Fondo", declaró el primer mandatario.
La Dama de Hierro del FMI aseguró que el organismo "no se apartará de las negociaciones" con la Argentina, y sostuvo que las reformas en marcha aquí "pueden generar crecimiento a la larga", siempre que el gobierno "se mueva con rapidez y convicción" en la elaboración de un plan "convincente".
Krueger precisó que el FMI tiene actualmente un equipo que está trabajando en Buenos Aires y otro en camino. Advirtió, sin embargo, que si bien hay "problemas fiscales que se corregirán con un presupuesto sólido a mediano" plazo, "reconocemos los límites a los ajustes que se puedan lograr, en medio de la actual contracción de la economía".
Al definir a la situación argentina, señaló que "todavía es volátil y riesgosa, y es importante que el equipo económico siga trabajando en forma firme, vigorosa y decisiva".
"A pesar de los enormes desafíos de la Argentina, hay motivos para ser optimistas sobre las perspectivas para toda la región", señaló.
El contagio
En cuanto a los efectos de la crisis argentina sobre el resto de Latinoamérica, Krueger dijo que "fue apenas un poco más importante en Uruguay, pero sólo al principio, ahora ya no afecta".
Respecto de las expectativas de crecimiento económico en países de América latina, destacó que Brasil y Colombia crecerán entre 1 y 2 por ciento, y Chile más del 3 por ciento en 2002. De todos modos, vaticinó que "el ritmo común de todos tenderá a desacelerar, y la desaceleración más importante se dará en la Argentina".
La funcionaria del FMI consideró finalmente que esto obedeció a que "la propagación de la crisis argentina fue modesta, porque hubo una buena administración macroeconómica, con tasas flotantes, en el resto de los países". Aseguró además que "son pocos los países que tienen una vinculación comercial estrecha con la Argentina. El mercado argentino no es demasiado importante para el resto de América latina", remarcó.
Dijo que las reformas encaradas en la Argentina pueden generar crecimiento a la larga, pero es esencial que las autoridades se muevan con rapidez y decisión para un programa convincente que pueda restablecer el crecimiento".
Con respecto a la política general del FMI, aseguró que ese organismo "no se apartará de las negociaciones entre acreedores y deudores" en el caso de países que, como Argentina, se declaren en imposibilidad de pagar sus deudas.Precisó al respecto que "en Japón hay 25 mil tenedores, en Alemania hay cinco mil dentistas, y en Italia hay diez mil jubilados que tienen bonos argentinos", por lo cual, afirmó, "hay muchos acreedores cuyos problemas son tangibles, y el Fondo no se apartará de las negociaciones con los deudores".
La Ciudad
