Año CXXXV
 Nº 49.468
Rosario,
sábado  04 de
mayo de 2002
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Investigan a policías por feroz paliza a un enfermo
Denunciaron que un joven esquizofrénico fue golpeado en su casa y en una comisaría

Santa Fe.- El juez de instrucción Julio César Costa investiga un presunto caso de apremios ilegales que habría sido cometido por cuatro policías de la seccional 6ª en perjuicio de un enfermo mental.
Según denunció Trinidad Gorondún, el suceso se registró el 24 de abril pasado cuando su hijo, Raúl Alberto Ruiz Díaz, de 32 años, sufrió un cuadro de esquizofrenia y comenzó a provocar desórdenes en su domicilio. Ante esto y temiendo que el joven se dañara a sí mismo o a sus acompañantes, los familiares de Ruiz Díaz resolvieron dar aviso a la policía.
Cuatro efectivos de la seccional 6ª se presentaron en la vivienda ubicada en Gaboto al 4200, en la zona oeste de la ciudad, quienes a pesar de las explicaciones brindadas por los familiares sobre el cuadro de salud que padecía Ruiz Díaz comenzaron a agredirlo a golpes de puño y patadas.
De acuerdo con el relato de la madre del damnificado, luego de reducirlo en forma violenta los efectivos lo subieron a un móvil policial y lo trasladaron a dependencias de la comisaría 6ª, donde se repitieron los ataques físicos, inclusive por parte de otros detenidos que se encontraban en la seccional, a quienes, según la denunciante, los policías les abrieron las celdas para que actuaran.
En la presentación la mujer señaló que Díaz permaneció detenido hasta pasada la medianoche del 24 de abril. Pero la versión policial difiere de esa versión, ya que una fuente consultada por La Capital sostuvo que el hombre recuperó la libertad cerca de las 21.45 de ese día, luego de haber sido revisado por el médico policial, quien aconsejó que ya podía retirarse.
Sin embargo, la mujer aseveró que cuando acudió a la dependencia policial a buscar a su hijo, los policías se negaron a entregarlo con el argumento de que "no te lo podemos dar porque todavía está nervioso".
El joven, según su madre, recién habría sido liberado aproximadamente a la 1 de la madrugada del día siguiente visiblemente maltrecho, con magullones y numerosos moretones en la cara y diversas partes del cuerpo.
La información oficial recabada por este diario admite que presentaba una lesión leve en la frente y en una de sus rodillas, las que están siendo investigadas para saber si fueron producto del "fuerte forcejeo" que, según la policía, sostuvo con los uniformados al ser reducido en su domicilio, o si son consecuencia de los golpes propinados por otros presos .
La madre también señaló que se dirigió, luego de la liberación de su hijo, a radicar la denuncia en la División Judiciales de la URI, pero allí un policía le habría dicho que volviera al día siguiente "porque no hay nadie y estamos durmiendo".
Entonces Gorundún resolvió presentarse ante el juez Julio César Costa para denunciar el suceso. La mujer también aseguró que uno de los efectivos de la seccional involucrada le advirtió que no hiciera nada porque de lo contrario le iban a "balear la casa". Aquí también las versiones son encontradas ya que desde la Jefatura se afirmó que fue el propio Ruiz Díaz quien se presentó el jueves 25 de abril a denunciar los presuntos apremios ilegales ante la División Judiciales.


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