Ariel Etcheverry / La Capital
Los integrantes de la familia Kuntschik estaban ayer deshauciados. Casi de casualidad habían salvado 6 mil dólares del corralito financiero impuesto por el gobierno nacional y un grupo de delincuentes aprovechó que se habían ido de vacaciones una semana para entrar a la vivienda, romper una caja fuerte empotrada en la pared y, además de apoderarse del dinero, llevarse alhajas y otras pertenencias de la familia. Sucedió ayer a la madrugada en el domicilio de San Juan 2243, entre bulevar Oroño y Alvear. Los ladrones primero intentaron forzar con una barreta el portón del garaje, pero como no pudieron fueron hacia la puerta principal de la casa, a la cual le hicieron saltar la cerradura. Una vez adentro tuvieron todo el tiempo del mundo y se movieron con tal comodidad que los investigadores estimaron que deben haber trabajado durante varios minutos para poder abrir la caja fuerte empotrada en la pared de un dormitorio. Las fuentes consultadas por La Capital no descartaban que los maleantes hayan utilizado alguna herramienta como una moladora para acceder al interior de la caja, donde la familia guardaba unos 6 mil dólares y alhajas. Los investigadores admitieron no tener pistas sobre los autores del atraco, especialmente porque a pesar del despliegue que tuvieron que hacer los ladrones no hubo testigos y ningún vecino pudo aportar datos concretos. Según contó a este diario María José de Kuntschik, los ladrones se llevaron otros objetos familiares y dejaron un gran desorden dentro de la vivienda. La mujer comentó que hacía una semana, ella, su marido y sus dos pequeños hijos habían partido en viaje de vacaciones a la provincia de Jujuy para visitar a unos familiares. Los Kuntschik arribaron de regreso a Rosario el lunes a la noche y en ese momento se enteraron de lo ocurrido. El robo fue descubierto por la madre de María José ese misma mañana cuando toda la familia ya estaba de regreso. "Cuando llegamos nos encontramos con la puerta entreabierta y con la cerradura violentada", sostuvo la dueña de casa. María José relató la terrible impresión que sintió ella y sus familiares al ver lo que habían hecho los ladrones. "Lo primero que hicimos fue tratar de preservar a nuestros hijos para que no se asusten", agregó. "Es horrible la sensación de inseguridad, de comprobar que gente extraña anduvo con naturalidad por todos los lugares de tu propia casa", dijo. Según el testimonio de la mujer, los desconocidos fueron directamente hacia las habitaciones de la vivienda. En uno de esos ambientes se encuentra empotrada una caja fuerte en la que los Kuntschik guardaban unos ahorros recuperados a tiempo cuando se implementó el corralito financiero. María José confesó que encontró la casa "toda desmantelada". Además de los casi 6 mil dólares que estaban depositados en la caja de seguridad, los delincuentes se llevaron varias alhajas. "El dinero lo habíamos salvado de que quedara en el banco", manifestó la mujer. "Nos salvamos del banco, pero no de los ladrones", añadió.
| Los ladrones volaron el picaporte para ingresar. | | Ampliar Foto | | |
|
|