Son la muticandidata al Oscar "Una mente brillante", con Russell Crowe; la comedia "Zoolander", protagonizada y dirigida por Ben Stiller; y "Kandahar", sobre el régimen talib en Afganistán; los tres estrenos de esta semana en los cines de Rosario en la mira de Escenario.
"Una mente brillante"
* * * \Intérpretes: Russell Crowe, Jennifer Connelly y Ed Harris.
Dirección: Ron Howard.
Género: drama.
Duración: 120 minutos.
Salas: Monumental y Village.
Lo mejor de "Una mente brillante" es Russell Crowe. Si bien comienza en forma excesiva, anticipándose un poco a la locura que sufrirá su personaje, y termina con una caracterización que no lo favorece, el actor se convierte en la clave de la película y sin él filme de Ron Howard sería un perfecto fracaso para ver una tarde aburrida de domingo por la televisión.
La historia de "Una mente brillante" no es nueva para el cine de Hollywood: se trata de un genio incomprendido que enloquece y toma por reales sus alucinaciones sobre una conjura rusa contra los Estados Unidos en la época de la guerra fría.
Después de una primera internación psiquiátrica, la esposa del genio se arriesga a tenerlo en casa y apuesta a ayudarlo para que se recupere. Contra todos los pronósticos, el genio retoma su antigua vida y varias décadas después recibe el premio Nobel de economía.
Basada en la vida real del matemático John Nash, la película es de una simplicidad que desmerece el tema tratado. Los terrores que tendría que provocar la locura aparecen en no demasiadas escenas, pero afortunadamente son aprovechados por la actuación de Crowe.
El principal defecto del filme es su estrechez de miras. Es interesante cuando no se sabe si Nash está loco o es víctima de una conspiración, pero ese interés se desvanece cuando se confirma la primera hipótesis. Y si se continúa viendo el filme hasta casi el final, es porque Crowe consigue atrapar la simpatía primero con un papel que recuerda al de "El informante" y después con su versión de lo que es una persona desprotegida y con su mente a la intemperie.
F.T.
"Zoolander"
* * \Intérpretes: Ben Stiller, Owen Wilson, Will Ferrell, Milla Jovovich y Jon Voight.
Dirección: Ben Stiller \Género: comedia \Duración: 100 minutos \Sala: Village \La discutible teoría que dice que la belleza y la inteligencia son atributos antagónicos es retomada por el excelente comediante Ben Stiller en esta película que contó con su libro y dirección. Stiller se mete en el mundo de los modelos masculinos encarnando a Derek Zoolander para esbozar una sátira que enjuicia muy duramente a los hedonistas de las pasarelas y sus glamorosos séquitos.
El filme, que promete un festín de gags protagonizados por carilindos ignorantes de lo que no sea su propio ombligo a poco de comenzar cae, sin embargo, en los peligrosos lugares comunes que condenan a una obra a la mediocridad. Chistes previsibles y una trama pueril que coloca a un modelo veterano (Zoolander) ante el umbral de su retiro, sitio al que es llevado por Hansel (Owen Wilson), un ascendente competidor que le quita el cetro del mejor del año, son los ingredientes que utiliza Stiller.
El diseñador Mugatu (Will Ferrell) integra una inescrupulosa organización delictiva mundial que rescata al modelo en decadencia para utilizarlo en un plan que incluye un magnicidio político. Pero Matilda (Christine Taylor) es una sagaz periodista que acude en ayuda del despistado Zoolander y empareja la lucha.
Con esos tibios argumentos el actor logra una muy buena performance, pero no consigue entretener demasiado y peca de ingenuo al considerar que con sus histrionismo bastará para consolidar el entretenimiento. El producto es una comedia regular, ambientada en Manhattan y con cameos de famosos entre los que se destacan David Bowie, Lenny Kravitz, Donald Trump, Claudia Schiffer y Tom Ford, entre otros.
M.M.
"Kandahar"
* * \Intérpretes: Nilofar Pazira, Asan Tantaï y Sadou Teymouri.
Dirección: Mohsen Makhmalbaf.
Género: drama.
Duración: 85 minutos.
Salas: El Cairo y Village.
Hace poco más de un año una noticia renovó el interés por Afganistán: la voladura de dos esculturas milenarias de Buda que, según el régimen talibán, atentaban contra la doctrina oficial. A raíz de eso, casi simultáneamente, el mundo se interesó en las burkhas, la vestimenta símbolo de la represión de la que son objeto las mujeres, una veda general para el género que incluía la salud, la educación y la libre circulación.
El brutal atentado a Estados Unidos del 11 de septiembre pasado acabó posicionando a Afganistán en el eje de otra instancia en la discusión política entre Oriente y Occidente. "Kandahar" se ubica como consecuencia de la sucesión de esos acontecimientos, como un testimonio a medias ficcional sobre una mujer de origen afgano que vive en Canadá y que intenta llegar a la ciudad para socorrer a su hermana que amenaza con suicidarse.
La mitad de realidad del filme es la que corresponde a Nilofar Pazira, protagonista de la historia real y de la película, una periodista que ingresa al país para rescatar a una amiga. El director iraní Mohsen Makhmalbaf retocó la historia y transformó a las mujeres en hermanas, y privilegió el mensaje moralizante con procedimientos del cine documental sobre la reflexión en torno a la compleja realidad del país.
El sentido estetizante de la narración, la polarización en el planteo de los personajes entre beatíficos occidentales y villanos afganos, el uso arbitrario de la lengua inglesa y el tratamiento maniqueo de las instituciones sociales, atentan contra un filme que pone el énfasis en la urgencia de polarizar aún más la discusión sin aportar demasiados matices.
R.B.
La Ciudad
